La ingente ola de calor que ha azotado a varios lugares del orbe en los últimos meses, incluído Estados Unidos, es la causante de la reducción del caudal de varias fuentes hídricas en ese país, haciendo que escenarios como ríos en el estado sureño de Texas, se vean afectados al llegar a sus más bajos niveles.
Si bien la alarma medioambiental en torno a las sequías es de gran envergadura, la reducción del nivel de los ríos ha traído consigo la revelación de inesperados rastros geológicos que dan cuenta de la vida prehistórica.
Precisamente, ese ha sido el caso del río Paluxy, que atraviesa el denominado parque estatal Dinosaur Valley, donde, al igual que lo ocurrido y reportado el año anterior, el bajo nivel del río ha permitido que quedasen al descubierto milenarios rastros de la vida de los dinosaurios en ese lugar.
En cuanto a esos descubrimiento arqueológicos, estos se han referido a la aparición de nuevas huellas de los gigantes animales que otrora ocuparon esos territorios.
Según recogen medios locales en Estados Unidos, los expertos han acusado que las nuevas huellas encontradas en la zona podrían tener una antigüedad de cerca de 110 millones de años.
Sobre el particular, en declaraciones entregadas por Paul Baker, gerente de la tienda del Parque Estatal Dinosaur Valley, a medios como CNN, afirmó que el espectáculo, además de sorprender a los trabajadores del parque debido a su especial historia, y lo que ello significa para la arqueología, también se ha convertido en un importante imán turístico para el emblemático sitio.
En declaraciones citadas por CNN, el funcionario del parque advirtió que es emocionante como humano, haber podido ver vestigios de vidas con las que se tiene tal diferencia de años, más aun siendo consiente de que esas huellas no eran vistas por humanos hace millones de años.
“En cierto modo, es casi como una búsqueda del tesoro”, advirtió Baker, al referido medio estadounidense.
En medio de la magnitud y majestuosidad del suceso avistado en Texas, los funcionarios del parque se han visto abocados a apoyar las labores de los expertos, volcándose a labores como la limpieza y mapeo de las huellas de los animales milenarios.
Si bien el suceso se ha convertido en foco noticioso en las últimas semanas debido al avistamiento derivado de la sequía, el funcionario citado por CNN ha afirmado que este fenómeno del avistamiento de huellas de dinosaurios es una situación que ha venido creciendo en los últimos años gracias al cambio climático.
En apartes de la entrevista con Baker, revelados por CNN, el funcionario afirmó emocionado que pensaba haber avistado todas las huellas posibles en el parque, pero los últimos años le han permitido descubrir cada año nuevos vestigios de la vida en los territorios que ahora ocupa, calificando el hecho como algo “increíble”.
Sobre el lugar que es objeto de estos importantes descubrimientos arqueológicos, se trata del Parque Estatal Dinosaur Valley, ubicado a aproximadamente hora y media de la ciudad de Dallas.
En el marco de las investigaciones, los expertos han advertido que los vestigios corresponden a rastros de especies conocidas como saurópodos y terópodos.
Así, en esta temporada del año, Texas se ha convertido en destino obligado para los amantes de la historia y los dinosaurios quienes, al margen del seco río Paluxy, y la dificultad que hara revisten actividades como la pesca y el kayak, se han congregado en torno del turismo arqueológico gracias a las huellas de los dinosaurios.
La temporada de sequía también se ha convertido en la ocasión para que los estudiosos de la prehistoria acudan al lugar para aprovechar la temporada de avistamiento de las huellas, teniendo en cuenta que durante otras épocas, el nivel del río logra ocultarlas nuevamente.
El margen del espectáculo arqueológico, el tema de la sequía despierta especial alarma en las autoridades de Estados Unidos, más precisamente las del estado de Texas, territorio que aproximadamente ha visto afectado más de un tercio de su superficie.
De acuerdo con medios locales, la actual temporada seca, ha sido la más calurosa que vive el estado de Texas al menos en los últimos 45 años.
Sobre las especies a las que pertenecen estas huellas, los expertos han explicado que en el caso de los terópodos, se trataba de una especie de la familia de los Acrocanthosaurus, en cuyas características se destaca un peso aproximado de 7 toneladas. Por su parte, los Sauropodseiden, o Paluxysaurus, eran animales que alcanzaban las 44 toneladas.
Se estima que las huellas identificadas son cerca de 130.