El equipo del fiscal especial Jack Smith acusó el pasado jueves 27 de julio al expresidente de Estados Unidos Donald Trump de otros tres casos, en el de los documentos clasificados, que se suman a los 37 anteriores.
El Departamento de Justicia ha añadido un primer cargo de alteración, destrucción, mutilación u ocultamiento de objetos; un segundo de alteración, destrucción, mutilación u ocultamiento corrupto de documentos, registros u otros objetos; un último de retención intencional de información sobre defensa nacional, según ha publicado la cadena CBS News.
“Se trata de interferencia electoral al más alto nivel. Están acosando a mi empresa, a mi familia y, sobre todo, me están acosando a mí. Los cargos son ridículos. Ellos lo saben mejor que nadie”, ha declarado Trump a Fox News.
El expresidente ha asegurado que “esto no estaría sucediendo” si el político republicano no “estuviera adelantando al (presidente del país) Joe Biden en numerosas encuestas”.
En la acusación original, Trump fue inculpado de 31 cargos de “retención de Información de Defensa Nacional” por supuestamente esconder documentos clasificados en Mar-A-Lago y negarse a devolverlos a los Archivos Nacionales.
En esta acusación subsiguiente, Smith añadió un cargo número 32: una “presentación” hecha por Trump a personas sin credenciales de seguridad “relativa a la actividad militar en un país extranjero”.
El país en cuestión no se identifica en la acusación, solo se le referencia como “País A”, pero se ha informado ampliamente de que se trata de Irán.
Trump habría compartido un plan secreto de ataque del Pentágono contra el País A con un escritor y un editor que estaban trabajando en un libro.
Dos miembros del personal de Trump también estuvieron en la reunión, que tuvo lugar el 21 de julio de 2021 en el Bedminster Club de Trump en Nueva Jersey y fue grabada.
En la acusación, se cita a Trump diciendo a sus invitados que “esto es información secreta” que podría haber desclasificado mientras era presidente, pero ya no estaba en posición de hacerlo. “Ahora tenemos un problema”, respondió supuestamente uno de los colaboradores del exmandatario.
Está previsto que el juicio contra Trump por el caso de los documentos clasificados comience el 20 de mayo de 2024, en el momento álgido de lo que se espera que sea una campaña electoral presidencial agria y divisiva.
Los nuevos cargos están vinculados a presuntos esfuerzos de Trump para obstruir la investigación del FBI y un intento de recuperar los documentos secretos desaparecidos.
Trump es sospechoso de intentar “borrar las grabaciones de las cámaras de seguridad” de su residencia de Mar-A-Lago, en Florida, para evitar que fueran facilitadas al FBI y a un gran jurado federal. También están imputados el ayudante personal de Trump, Waltine “Walt” Nauta, quien ya estuvo incluido en la anterior acusación de conspiración, y Carlos De Oliveira, el administrador de la propiedad de Mar-A-Lago.
Trump, Nauta y De Oliveira supuestamente intentaron que otro empleado del magnate, que no fue identificado, borrara los videos de las cámaras de seguridad de la mansión.
De Oliveira, según la acusación, habría dicho a ese “Empleado de Trump 4″ que “el jefe” quería que se borrara el servidor que contenía los registros de las cámaras de seguridad de un almacén. Carl Tobias, profesor de derecho en la Universidad de Richmond, consideró que estos señalamientos acerca de que Trump quería borrar el material audiovisual de seguridad “fortalecen los casos de obstrucción y mentira”.
El exmandatario se ha declarado inocente de más de una treintena de cargos que le han sido imputados en el marco del caso sobre los documentos clasificados hallados en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, tras su salida de la Casa Blanca.
El juicio contra Trump por negligencia en el uso de documentos confidenciales comenzará en mayo de 2024, en plena campaña electoral a la Casa Blanca.
¿Una acusación Federal impide que Donald Trump se postule a la presidencia?
No. Ni la acusación en sí ni una declaración de culpabilidad impedirían que Trump se postulara ni que ganara la presidencia en 2024.
Y, como mostró su imputación de este año en Nueva York (en un caso de pagos secretos para acallar señalamientos), históricamente los cargos penales han impulsado enormemente su recaudación de fondos. La campaña anunció que había recaudado más de 4 millones de dólares en las 24 horas posteriores a que se hizo pública esa acusación formal, rompiendo su récord anterior después de que el FBI allanó el club Mar-a-Lago de Trump.
Con información de AFP, Europa Press y AP*