De acuerdo con los Centros para el Control de Enfermedades (CDC), el fentanilo es actualmente la principal causa de muerte entre los estadounidenses en el grupo de edad entre los 18 y los 45 años. Es una sustancia altamente adictiva y genera grandes márgenes de ganancias para quienes participan en su fabricación y comercialización.
Ante esto, las autoridades de Nueva York decidieron instalar una máquina expendedora de salud pública totalmente gratuita, la cual entrega sin ningún costo Narcan, una medicina para revertir las sobredosis por fentanilo y así salvar la vida del ciudadano.
Pero lo que sorprendió a la opinión pública fue que, en menos de un día, la máquina ya se encuentra vacía. En su interior no solo había Narcan, también contenía pipas de crack, condones, tampones, chicles de nicotina, botiquines de primeros auxilios, toallas higiénicas, vitamina C y pruebas de covid-19.
La máquina fue instalada el lunes 5 de junio en Brownsville, Brooklyn, y se activó a las 9:00 de la mañana del martes 6 de junio. En pocos minutos, quedó con mínimos recursos.
El único requisito para que cualquier ciudadano pueda obtener los recursos que ofrece la máquina es ingresar el código postal correcto.
¿Por qué es tan importante el Narcan para quienes padecen adicción a las drogas?
La Administración de Alimentación y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) aprobó que la naloxona, más conocida como Narcan en su versión en spray nasal, sea vendida de manera libre en todos los establecimientos comerciales del país.
Hasta ahora, la versión en spray nasal era vendida con prescripción médica o en centros de salud locales. Sin embargo, esta decisión de la FDA cambia el panorama y las reglas juego, pues permite que pueda ser adquirida por cualquier ciudadano.
El comisionado de la FDA, Robert Cliff, calificó la medida como “una necesidad urgente de salud pública”.
“La aprobación del spray nasal de naloxona para su venta libre ayudará a mejorar el acceso a esta medicina, aumentando la cantidad de lugares donde está disponible y ayudando a reducir las muertes por sobredosis de opioides en todo el país“, aseguró el funcionario Califf en un comunicado dado a conocer a la opinión pública.
Este spray nasal, autorizado en Estados Unidos desde 2015, se ha convertido en el arma imprescindible contra la crisis de muertes por sobredosis que sacude al país. El Narcan funciona rápidamente porque envía moléculas de naloxona al cerebro, y estas desplazan a las moléculas opioides de los sitios receptores para revertir una sobredosis.
“Necesitamos desestigmatizar y normalizar el uso de naloxona, especialmente entre los jóvenes”, dijo Scott Hadland, pediatra especializado en adicciones, antes de la votación.
Algunos temen que el saber que existe un antídoto fomentará el consumo de drogas. Pero la doctora Leslie Walker-Harding desestimó este razonamiento, comparando el acceso al Narcan con el de la píldora del día después.
“A la gente le preocupaba que los jóvenes tuvieran más relaciones íntimas y no es así como piensa la gente. Y no es como pensarían las personas que tienen un trastorno por consumo de opioides”, señaló.
La venta sin receta de Narcan permitiría distribuirlo a través de máquinas dispensadoras. En Washington, por ejemplo, organizaciones esperan instalar tres, que darían un acceso discreto y anónimo al antídoto, en cualquier momento del día o de la noche.
Precisamente en esta ciudad ya las autoridades están haciendo todo lo posible para que la gente sepa que existe Narcan: paneles gigantes, números gratuitos para llamar y agentes del metro equipados con dosis. Pero, sobre todo, diferentes asociaciones lo reparten por las calles.
Con información de AFP