La carrera por la nominación republicana a la Presidencia de Estados Unidos ya está en marcha con Donald Trump y Ron DeSantis como protagonistas de la favorabilidad de los electores, y de las primeras polémicas, en un contexto en el que se anticipan fuertes señalamientos en medio de la pugna política.
Precisamente, uno de esos escenarios de pugna política que ya se vive tuvo como tema preponderante el de la migración, lastre que golpea a Estados Unidos y que pide una posición clara por parte de los aspirantes, respecto a las estrategias a tomar para regularla en favor de sus propios ciudadanos.
Así, este martes, en medio de una visita al estado de New Hampshire, lugar en el que actualmente hacen campaña, Trump y DeSantis, el gobernador de Florida, decidió dar el primer golpe en contra de uno de sus modelos, el expresidente Trump, al afirmar que en medio de la estrategia antimigratoria que ha de poner en marcha Estados Unidos, es necesario deponer el modelo que se dirige desde Washington como centro de poder, y tomar las decisiones necesarias para “asegurar la frontera sur del país”.
Así, DeSantis afirmó que su propósito –de llegar a la Casa Blanca– sería lograr ‘tener éxito’ en aquellas áreas en las que su principal contrincante en el camino republicano, el expresidente Trump, falló durante su paso por la Presidencia.
De tal forma, en uno de los estados en los que primero se votarán las primarias, New Hampshire, DeSantis presentó un largo discurso sobre la propuesta de política de inmigración que se debe poner en marcha, y cuya propuesta inicial ya había presentado recientemente durante su visita al estado de Texas.
En ese sentido, el gobernador de Florida, segundo en las intenciones de voto de su partido por detrás de Trump, ha apostado por el tema migratorio como estandarte, buscando ganarse la simpatía de los electores republicanos, un discurso que tiene amplia cabida, incluso en aquellos que no sufren directamente los lastres del fenómeno al ubicarse en estados que no sufren tanto por este problema.
Buscando diferenciarse de Trump, el candidato señaló que su propuesta sería ‘bloquear’ toda la frontera con México, advirtiendo que tiene claro que un error sería ‘quedarse corto’, cómo le sucedió a Trump.
“Vamos a construir el muro”, afirmó DeSantis, añadiendo que su propósito es no quedarse en promesas grandiosas y grandilocuentes, sino simplemente lograr ‘resultados reales’, lo que ha sido tomado por medios locales en Estados Unidos como una ‘pulla’ a la gestión de Trump y su otrora promesa del muro, la misma que no pudo llevar a cabo.
“Se acabó el tiempo de las excusas. Ahora es el momento de entregar resultados y finalmente hacer el trabajo”, afirmó DeSantis en un discurso que entre líneas atacó la falta de ejecución de los proyectos por parte del expresidente Trump.
De momento, el tema migratorio ha constituido el primer pilar de la propuesta de DeSantis, en medio de la que también ha afirmado que planea cortar con el derecho de ciudadanía por nacimiento.
Así, esta se suma a su promesa de “sí cumplir con la construcción del muro”, e incluso, también ha llegado a versar sobre su propuesta de poner uniformados estadounidenses en territorio mexicano como una estrategia de apoyo a la lucha contra el narcotráfico.
De acuerdo con medios locales en Estados Unidos, si bien de momento DeSantis también ha apostado a su juventud como argumento para diferenciarse de Trump, también deberá ser consciente de los obstáculos que algunos de sus antecesores han tenido en la ejecución de sus propuestas, en lo que se refiere a los cambios políticos que ello requiere.
En ese sentido, medios locales han notado que el cumplimiento de las promesas que DeSantis ha hecho su bandera de momento, requieren no solo la decisión política y la capacidad de ejecución, sino también del beneplácito de otras instituciones, en la medida que ellas requieren el visto bueno por parte de terceros estados, e incluso una enmienda a la Constitución de los Estados Unidos.
En New Hampshire, consciente de que las prioridades son otras diferentes a la de más migración per se, DeSantis apostó por plantear discursos enfocados en la necesidad de combatir con dureza el tráfico de opioides, en momentos en los que han aumentado las muertes por sobredosis en el país.
Así, el discurso de DeSantis se centró en la necesidad de tomar medidas más contundentes para el combate de los carteles de la droga que se encargan de llevar esas sustancias a las calles de EE. UU., por lo que se comprometió a elaborar la política antidrogas más “asertiva” contra las agrupaciones relacionadas con el narcotráfico.
“Tenemos que hacerlo porque salvará vidas”, sentenció el gobernador de Florida.
En medio de su campaña para lograr mayor favoritismo que Trump, DeSantis también hizo mención de algunos de los problemas de gestión del expresidente frente al partido, refiriendo los resultados adversos del liderazgo de Trump en las pasadas elecciones, notando que en estados en los que el liderazgo y las voces apuntaban en el Partido Republicano a otras figuras, como su caso, los resultados fueron más favorables para el partido.
En declaraciones recogidas por medios internacionales, el gobernador de Florida apuntó que si bien Florida logró una ‘ola roja’, referida al color de su partido, fue por la existencia de figuras que jalaron al partido, como fue su caso.
La cuestionada posición de Trump ante el electorado, actualmente, también es compartida por figuras como Kevin McCarthy, un senador republicano de California, quien sentenció que si bien Trump podría ganar las próximas elecciones, su partido se debería cuestionar si en efecto es el candidato que deben llevar, cuestionando además si eventualmente el expresidente de 77 años es el más fuerte de los aspirantes de la colectividad.
En medio de la ya creciente disputa de favorabilidad entre Trump y DeSantis, medios locales en Estados Unidos ya han comenzado a establecer comparativos, señalando precisamente que los espacios de la prensa con DeSantis y Trump han comenzado a evidenciar la diferencia de estilos, pues mientras que en una reciente visita a New Hampshire, más precisamente a Concord, para un almuerzo organizado por un club de mujeres republicanas, Trump se mostró distante y controlador con la prensa, DeSantis se ha mostrado más cercano y amable ante las preguntas que quieran plantearle.
Además del discurso enfocado en el “yo sí cumplo lo que prometo”, para atacar a Trump, DeSantis también le ha apostado a criticar de frente al expresidente, poniendo en evidencia la posición del magnate frente a temas como el aborto, señalando a Trump de haber cambiado en el espectro político para moverse hacia la izquierda.
Debido a su evento en New Hampshire, DeSantis también despertó polémica con las organizadoras del evento de Trump, la Federación de Mujeres Republicanas de New Hampshire, quienes señalaron que el gobernador de Florida buscaba robarse el foco.
New Hampshire es un lugar importante para los republicanos, en tanto en las elecciones generales de 2016 y 2020 terminaron perdiendo frente a los demócratas.