Este artículo hace parte del cubrimiento especial de ARCADIA, en alianza con Cali Creativa, del Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, organizado por la Alcaldía de Cali.En las costas colombianas, bajo el soplo salado del viento, los primeros africanos que llegaron al continente como esclavos se pusieron en la tarea de construir imitaciones de los instrumentos musicales que recordaban de su tierra. “Los instrumentos son la memoria del pueblo negro”, cuenta Nidia Góngora, cantora del Pacífico. Así nacieron sonidos de las entrañas de estos suelos. Gracias a los esclavos, Colombia es tierra de marimbas, cununos, bombos y guasás, entre otros instrumentos de herencia africana y de unión indígena, europea y afro.Les preguntamos a fabricantes de diferentes comunidades del litoral Pacífico sobre su proceso de elaboración y la historia detrás de cada uno de los instrumentos que suenan en las tarimas del Festival Petronio Álvarez.MarimbaLa marimba es un armazón de 23 láminas de madera de chonta, 23 tubos de guadua, y un tronco bañado en fibra vegetal. Es conocida como la reina o como el piano de la selva porque cumple la misma función melódica con sus notas y sostenidos.Fue creada para imitar el balafón africano, el cual se establecía en el suelo y se tocaba sentado. La marimba tomó vuelo y se posicionó en el aire colgada de las vigas del techo. Sin embargo, y con el tiempo, para facilitar la movilidad del instrumento, se creó la base que se maneja en la actualidad. La marimba es de palma de chonta porque tiene mayor resonancia y resistencia para que al golpearla repetidas veces no se desafine. “Pero en lo folclórico no hay nada escrito”, dice Manuel Ramón Otero, músico y percusionista experto en folclor colombiano. “Aunque la chonta tenga las mejores características, te puedes encontrar a alguien, en el inmenso Pacífico, que lo haga diferente”.Las baquetas son de caucho vegetal y una madera especial con la que se construye también la base del instrumento. Otero explica que afinar a la reina es difícil, ya que se deben pulir sus teclas y cortar las guaduas. Antes cada marimbero lo hacía al oído: ahora muchos de ellos no saben cómo y han comenzado a usar el afinador del piano.Cununos, tambores y bombosNidia Góngora asegura que “lo único que ha cambiado para las comunidades afro, tanto del Pacífico como del Atlántico, es el uso de los tambores”. Para su construcción los cueros varían. “En el Pacífico usan cueros más gruesos que en el Atlántico”, cuenta Otero. Generalmente se usa cuero de chivo, venado, tatabro, saino o vaca. Este último solo se utiliza en los cununos machos, que con 120 centímetros de altura, emiten un sonido más grave.Le puede interesar: Diccionario ARCADIA de expresiones del Pacífico para que el Petronio ‘lo coja clin’La madera, en cambio, se elige dependiendo de las condiciones naturales de cada región. Deben ser más o menos blandas para facilitar su manipulación y transporte.En el Cauca, la elaboración de los cununos y los bombos está rodeada de magia. Sus cuerpos son de madera o balso y el proceso de construcción requiere paciencia. “Hay que esperar el tiempo; es decir, no se pueden cortar en luna. Se escoge el árbol más grande y se tumba. Donde estuvo este hay que sembrar otro”, relata Nany Valencia, gestora cultural del municipio de Guapi. “Después de cortados, los agricultores acostumbran a tirar los troncos al agua y dejarlos bajar con la corriente. El dueño o encargado de los troncos los va custodiando en una balsa o en su potrillo y los recoge cuando llegan a un lugar determinado, que bien puede ser el pueblo o el caserío”. Antes se tenía la costumbre de que el tamborero hiciera su propio tambor y creara un lazo con él. “Este era un proceso que podía durar cinco días”, explica Otero. Este es el caso de Fernando Cuero, luthier y músico de Guapi, que sabe construir tambores y utiliza un nudo que ha sido legado en su familia de generación en generación.La afinación de estos instrumentos es un proceso más lento y de mayor duración. Los tambores se dejan bajo el sol o cerca al fuego para que el cuero se tense con el calor. Otra forma de hacerlo es a través de las cuñas donde está amarrada la cuerda o los aros donde está puesto el cuero. En los instrumentos percutivos se suele hacer la diferencia entre macho y hembra. Según los intérpretes, la hembra “juega”, es más bullosa, mientras el macho tiene la base. Según Valencia, los instrumentos de percusión en su tierra vienen en duplas: “el bombo arrullador, conocido también como el bombo hembra y el bombo golpeador, conocido como el bombo macho. También hay diferencias entre el cununo tapador y el cununo repicador”.Le puede interesar: Una guía para acercarse a la diversidad musical del PacíficoGuasáEl guasá es un trozo de guadua hueca cerrado por dos discos de caña de balso atravesado por puntillas de chonta. Está lleno de piedras, de semillas secas.Según Cuero, el guasá viene desde África y se basa en los calabacillos que usaban allá. Al principio, se rellenaban con pepas de maíz, pero hoy se utilizan las achiras, “porque tiene un sonido más dulce, como el de una mujer”.La cantidad de puntillas y de achiras que se pongan, depende de la sonoridad que se desee. Entre más lleno, más grave.ViolinesLos violines son populares en el Cauca, donde se tiene como ritmo base la chirimía del norte. Ronal Balanta, conocedor de los violines caucanos o negros, cuenta que existen dos teorías respecto a su aparición: la primera dice que los esclavos africanos hicieron una réplica del violín europeo en guadua, cuyas cuerdas eran de crin de caballos o tripas de gato; la otra, es que los violines negros de la zona tienen un origen puramente africano. Según Balanta, esta creencia se debe “al hallazgo de un violín muy antepasado que no se relaciona con el europeo”.Vean todos los contenidos de nuestro especial #ColombiaEsNegra haciendo clic aquí.