Las labores investigativas adelantadas por la Policía Nacional permitieron dar un importante golpe en contra del abigeato, que se ha convertido durante los últimos meses en uno de los delitos de mayor impacto en los departamentos de Quindío, Risaralda y el norte del Valle del Cauca.
En esta ocasión se logró la recuperación de 12 bovinos que alcanzan un avalúo de $150 millones, de los cuales seis fueron encontrados en una finca de la vereda El Congolo, perteneciente al corregimiento Morelia, en zona rural de Pereira.
Mediante las labores de identificación que llevaron a cabo los integrantes de la Dirección de Carabineros y Policía Ambiental, se pudo determinar que estos animales habían sido robados en la vereda Calamonte del municipio vallecaucano de Ulloa, durante la madrugada del pasado 28 de enero.
Un hombre fue capturado en flagrancia y de inmediato quedó a órdenes de la Fiscalía General de la Nación para que responda por el presunto delito de receptación, ya que al parecer compró la media docena de ejemplares de razas Brahman y Girolando a sabiendas de que eran robados.
Ese mismo día, el accionar de las autoridades en la vereda La Gran Vida, que pertenece al corregimiento Villa Gorgona, en el municipio de Candelaria, Valle del Cauca, permitió la incautación de las otras seis reses que habían sido hurtadas.
Al parecer el cerebro de toda esta operación clandestina era el administrador de una finca en la ciudad de Pereira, quien se encargaba de esconder las reses en varios municipios del Valle del Cauca para posteriormente enviarlos a Armenia, en donde eran sacrificados para comercializar su carne.
Se conoció que este individuo se encontraba en la capacidad incluso de falsificar las guías de movilización, con las cuales intentaba evadir los controles que hacen las autoridades en las carreteras para verificar la procedencia legal de los semovientes.
Actualmente se desarrolla un plan de contención contra el abigeato, que es uno de los delitos que mayores pérdidas económicas ocasiona a los productores del Quindío. En esta estrategia se cuenta con las acciones articuladas del Comité de Ganaderos, la Gobernación y las diferentes alcaldías.
Se busca, por ejemplo, establecer puestos de control móviles en las principales vías de acceso a las fincas, el fortalecimiento de las redes de apoyo y los patrullajes en el día y la noche; para que se logre la plena identificación de todos los vehículos que se movilizan por las zonas ganaderas y las personas que laboran en las haciendas.
Desde el Comité de Ganaderos del Quindío se ha dispuesto el número telefónico 3145101708, que servirá como línea de comunicación directa entre los propietarios de las fincas y la Policía Nacional para conocer todas las actividades de prevención y control que se realizan.
También se puede obtener información acerca de cómo se están desarrollando los operativos y cuáles son los resultados de los mismos para esclarecer los hechos de abigeato, aprovechando la conformación de un grupo de 12 uniformados que están enfocados en la lucha contra esta actividad ilícita.
Igualmente, en atención a las peticiones hechas por los ganaderos del Quindío, la Policía Nacional designó un jefe de operaciones contra el abigeato que trabaja de manera conjunta con la Fiscalía General de la Nación para la resolución de los casos.
De acuerdo con el reporte que entregan las autoridades, desde septiembre de 2022 se han presentado 10 hechos de abigeato de los cuales 4 han sido denunciados. De estos, el 75 por ciento han tenido éxito al resolverlos, lo que significa la recuperación de 49 reses y el decomiso de más de una tonelada de carne.
A los propietarios y administradores de las fincas se les pide extremar las medidas de seguridad; como la solicitud de antecedentes de las personas que llegan a solicitar empleo, la verificación constante de las cercas y el traslado de los animales durante la noche a los potreros que están más cercanos a las casas.