El fuerte invierno que azota al Eje Cafetero genera estragos en el municipio de Salento, ubicado en la zona nororiental del departamento del Quindío en los límites con Tolima y Risaralda, que es uno de los sitios más visitados por los turistas.
Las lluvias de los últimos días tienen a esta localidad en alerta máxima por riesgo de deslizamientos, ya que de acuerdo con los datos que entrega la Alcaldía Municipal se tiene un promedio de cuatro derrumbes cada día.
Sobre este asunto la secretaria del Interior de Quindío, Juana Camila Gómez, aseguró que los deslizamientos de tierra y capa vegetal en un sector conocido como La Balastrera dejaron incomunicadas a varias comunidades por el cierre de la vía Arrayanal - Salento.
Explicó que para recuperar la movilidad fue necesario realizar un trabajo coordinado entre el Instituto Departamental de Tránsito del Quindío, la Policía Nacional, la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres, Empresas Públicas del Quindío y el Ejército Nacional.
“La carretera la pudimos limpiar gracias a un carrotanque del Batallón de Ingenieros Francisco Javier Cisneros, quienes retiraron todo el lodo para evitar un accidente a las personas que transitan por el sector en sus motocicletas y vehículos” indicó.
En el Quindío durante los últimos días se han presentado más de 70 deslizamientos de tierra en diferentes zonas, que obligan a las administraciones municipales a tomar medidas como el cierre de algunos tramos viales para salvaguardar la vida de los usuarios.
Desde la Alcaldía Municipal de Salento, Quindío, por ejemplo, se ordenó la prohibición temporal para circular por la vía terciaria que conduce a la vereda Camino Nacional; ya que se tienen varios puntos críticos que ponen en serio riesgo a quienes transitan por el lugar.
Tras la evaluación por parte del Comité Municipal para la Gestión del Riesgo y la Secretaría de Obras Públicas de Salento, se pudo establecer que no es viable realizar ninguna intervención en los puntos críticos porque los fuertes aguaceros han desestabilizado el terreno, por lo que únicamente se tiene habilitada de manera provisional para el tránsito de peatones.
Lo cierto es que este cierre de la carretera que conocida como Salento - Toche, tiene a 17 familias aisladas y sin posibilidades de hacer sus compras básicas de víveres o desplazarse a la cabecera municipal para realizar algún trámite o vender sus productos agrícolas.
Se buscan soluciones con la comunidad para que se pueda realizar el abastecimiento de manera eficaz, aunque se pide ayuda desde la Alcaldía a la Unidad Departamental para la Gestión del Riesgo y el Ejército Nacional para trazar un plan seguro por el peligro que significa transitar por algunos puntos críticos como el sector Corozal, donde existe alto riesgo de deslizamiento.
La Alcaldía de Salento con la colaboración de la compañía Nepsa y Empresas Públicas del Quindío, adelantan labores de limpieza en el Parque Principal y algunas de las calles del municipio con agua a presión.
Además se realiza la recolección de residuos y el movimiento del terreno para la fertilización, con el propósito de proceder posteriormente a sembrar el nuevo césped.
Durante los días que han transcurrido de este año 2023 las lluvias en el Quindío han ocasionado al menos 10 emergencias de gran magnitud entre los que se registran 7 deslizamientos, el daño estructural en el sector Las Peñas de la vía Génova - Pedregales y el riesgo de colapso por derrumbe en una zona conocida como Escalera en la carrera 9 de este municipio.
Igualmente se presenta daño estructural en el puente de la vereda Bambuco en Filandia y otras afectaciones en poblaciones como Pijao, Salento y Circasia.
La Gobernación del Quindío hace un llamado a los habitantes del departamento para que tomen las medidas necesarias de prevención ante esta fuerte ola invernal que podría prolongarse durante varios meses, cómo asegurar los techos y limpiar con regularidad las canales y bajantes; a la vez que mantienen la recomendación de evitar los paseos de olla y no transitar por las áreas que tienen riesgo de inundación.
Para reportar cualquier cambio en el entorno como inclinación de árboles o postes, agrietamiento de muros, terrenos y el aumento en el nivel de los afluentes hídricos; la comunidad puede comunicarse a las líneas 123 de la Policía, 144 de la Defensa Civil y 132 de la Cruz Roja.