El Ejército Nacional y la Fiscalía terminaron con la pesadilla de un ciudadano norteamericano que habría sido sometido a una millonaria extorsión en el Eje Cafetero por cuenta de unos videos con contenido sexual.
Una mujer le habría advertido que el material fílmico llegaría a las manos de su familia, pero que él podría frenar el envío si depositaba una alta cantidad de dinero. Inicialmente, aceptó la propuesta y giró $30.000.000.
Al parecer, la víctima se cansó de las intimidaciones telefónicas y tomó la decisión de encender las alarmas ante las autoridades, quienes armaron un plan para atrapar a las personas que lo estaban atormentando.
Dos de los extorsionistas fueron citados en un centro comercial del municipio de La Tebaida para que recibieran otro pago de manos del extranjero: el paquete contenía cinco millones de pesos.
Una vez la mujer aceptó los billetes, ambos fueron interceptados por funcionarios del Ejército Nacional por protagonizar el presunto delito de extorsión bajo la modalidad íntima en flagrancia.
En medio de los actos urgentes, se conoció que los implicados en este proceso se habrían desplazado desde la capital del departamento del Atlántico para materializar el cobro de la extorsión.
Frente al material probatorio, ellos no aceptaron los cargos y un juez de la República les decretó medida de aseguramiento intramural mientras avanzan las investigaciones en su contra.
Ahora bien, el Gaula Militar indicó que está comprometido con la seguridad de los habitantes de Caldas, Quindío y Risaralda, e instó a denunciar este tipo de acontecimientos por medio de la línea gratuita nacional 147.
Falsa encomienda: con esta modalidad, banda de extorsionistas robó $200 millones en Santander
Por otro lado, en el departamento de Santander está tomando fuerza una modalidad de estafa que termina en extorsión, denominada la falsa encomienda. Los grupos criminales se aprovechan de la desinformación y confianza de los ciudadanos para lograr engañarlos, consiguiendo así su principal objetivo: que la víctima realice transferencias bancarias.
Así era como delinquía una banda de extorsionistas denominada Los Aduaneros, cuyos presuntos integrantes eran dos hombres y dos mujeres, que fueron capturados en el municipio de Barbosa por uniformados del Gaula de la Policía.
Luego de varios meses de investigación, las autoridades descubrieron el modus operandi de Los Aduaneros. Esto consistía, inicialmente, en identificar a la víctima mediante redes sociales, en que los ladrones se presentaban como un familiar con el fin de crear un primer acercamiento para generar confianza con la víctima.
Una vez ganada la confianza del supuesto familiar o amigo, le pedían a la víctima el favor de recibir una encomienda, la cual sería enviada por medio de una empresa de transporte aéreo y mensajería internacional, con todos los gastos pagos.
“Estas personas se hacían pasar por familiares o amigos que residen en el extranjero, con el propósito de hacerles creer a las víctimas que estaban recibiendo una encomienda. Posteriormente, los delincuentes amenazaban a las víctimas suplantando a funcionarios de la Policía fiscal y aduanera”, aseguró el coronel Gustavo Adolfo Rodríguez Hernández, comandante de la Policía Santander.
Aceptada la propuesta por parte de la víctima, esta suministraba sus datos personales para poder recibir dicho encargo en su residencia. Acto seguido, los delincuentes tomaban de nuevo contacto con el afectado, para confirmar el supuesto envío, anexando una fotografía de la guía.
Días después, la víctima recibía una llamada de una persona que se identificaba como supuesto policía aduanero y le informaba que tenía una encomienda represada sin autorización de entrega, por diferentes problemas generados. Dada la explicación, le exigía el pago de “aranceles e impuestos adicionales” o este se vería en la obligación de dar el reporte a la Dian y capturarlo.
“Utilizando la amenaza de emitir una orden de captura en su contra bajo el argumento de que en la encomienda se encuentran divisas (dólares y/o euros), los extorsionadores exigían cantidades económicas que varían entre los tres millones y los 50 millones de pesos”, detalló el coronel Rodríguez Hernández.