Debido a la gravedad de sus heridas, tres de las ocho personas que resultaron afectadas tras la explosión de un paquete bomba ocurrido en la vía San Gil-El Socorro, fueron trasladadas a la capital santandereana.
Así lo dio a conocer el coordinador médico del Hospital Regional de San Gil, Santander, César Barajas, que entregó un parte sobre el estado de salud de las personas que resultaron afectadas por la explosión, ocurrida en la mañana de este martes.
En el hecho resultaron heridos ocho contratistas de una empresa concesionaria vial y de la electrificadora de Santander que adelantaban trabajos en el sector conocido como la curva de “leche de cabra”.
Un paquete envuelto en cinta quirúrgica, se encontraba abandonado en la vía y, cuando operarios de la concesión vial intentaban establecer de que se trataba, se registró la explosión que dejó las ocho personas lesionadas. En el momento, el lugar se encuentra acordonado.
Los heridos fueron trasladados a centros asistenciales de San Gil, en ambulancias de la Defensa Civil, de la concesión vial, de Asismedic y del hospital Regional Manuela Beltrán.
Los trabajadores que fueron trasladados el Hospital Universitario de Santander, cuya sede está ubicada en Bucaramanga, y fueron identificados como Éderson Sánchez, Wilson Angarita Joya y César Fernando Díaz. Según el reporte, las lesiones que presentan revisten gravedad.
“Se brindó atención a tres pacientes por un artefacto explosivo, presentando múltiples heridas y quemaduras en la región anterior del cuerpo con trauma y contusión pulmonar, con heridas en rodilla, quemaduras de primer y segundo grado, que requirieron estabilización y traslado al Hospital Universitario de Santander”, contó el médico Barajas.
Así mismo, señaló que los restantes operarios entre los 24 y 40 años fueron trasladados a la clínica Foscal Santa Cruz de la Loma, uno de ellos, un hombre de 40 años, es quien presenta mayor gravedad.
“Una persona de 40 años, que es la más afectada, tiene quemaduras en el 40 % de su cuerpo (grado 2 y 3). Ya fue intervenida quirúrgicamente, debe ser remitido a un hospital de mayor nivel para atención especializada y está asistido con respiración mecánica. Además tiene varias fracturas”, aseguró.
Entre tanto, desde la Clínica Foscal, se informó que salvo uno de los trabajadores heridos, cinco fueron evaluados por lesiones en varias partes del cuerpo, pero ya les dieron de alta tras recibir la atención médica requerida.
Con la presencia del ministro de Defensa, Diego Molano y la cúpula de las Fuerzas Militares y la Policía se adelanta un Consejo de Seguridad para tomar medidas que permitan evitar situaciones como la registrada en esta región del país.
El gobernador de Santander, Mauricio Aguilar rechazó el atentado y anunció que se realizará una Consejo de Seguridad para analizar la situación y tomar las medidas necesarias para reforzar la seguridad en ese departamento.
“Rechazo el hecho perpetrado en las últimas horas en la vía San Gil- El Socorro. No se avanza infundiendo terrorismo sino con trabajo y diálogo. Toda mi solidaridad con los ciudadanos que resultaron heridos”, señaló en su cuenta en Twitter.
Este miércoles se han registrado alteraciones de orden público en varias regiones del país, lo que ha originado algunas restricciones viales.
En la vía Bucaramanga-Costa Atlántica se presenta problemas de movilidad tras la voladura de un puente en Curumaní, Cesar.
Entre tanto, la vía Pamplona-Cúcuta también se encuentra cerrada mientras las autoridades tratan de determinar si hay presencia de artefactos explosivos.
Previo al Consejo de Seguridad en Santander, el ministro de Defensa anunció que ante la amenaza del ELN en varias regiones del país, se garantizará la seguridad sobre todo en las zonas de conflicto con la presencia de más de 240.000 hombres de la fuerza pública y en 14 municipios de la Costa Pacífica está lista la Armada para vigilar las vías marítimas y fluviales.
Dijo Molano que “aquí hay una fuerza pública que protege a los colombianos, que garantiza su seguridad y en esas regiones se han desplegado operativos especiales en las vías, en los puertos, en el transporte marítimo, fluvial y en cabeceras municipales (…). Lo que no podemos es dejarnos amedrentar por esas acciones de estos grupos cobardes”.
Así mismo, denunció el ministro de Defensa que ese paro armado del ELN es con fines politiqueros. “No es casualidad que faltando 20 días para las elecciones surjan estás amenazas, pero tiene uno que preguntarse qué propósitos tienen, qué interés politiqueros hay, justo antes de las elecciones. Buscan amedrentar a la sociedad colombiana. ¿A quién beneficia? ¿A quiénes buscan favorecer? Pareciera que están buscando influenciar para que haya falsas promesas de paz o para que haya perdones por parte de otros”.