¿Cuantos son los Colombianos? Nadie lo sabe. Supuestamente Nicolás Martínez, el niño que nació por cesárea el pasado 19 de septiembre en el hospital de Kennedy, que midió 50 centímetros y pesó 3.340 gramos, es el habitante número 44 millones de Colombia. Eso dicen pero en realidad nadie lo sabe. A lo mejor no es Nicolás el que deba ostentar el título sino un niño embera o el recién nacido de una mujer desplazada. En Colombia hace 10 años no se hace un censo y debido a los problemas de las anteriores mediciones (ver recuadros) la información está desactualizada y así no hay proyección que valga.El tamaño de la población no sólo determina el monto de las transferencias que hace la Nación a los departamentos y municipios para el gasto social en salud y educación sino que señala la distribución de la representación política en las curules de los cuerpos colegiados. De los dos el que se encuentra menos alejado de la realidad es el sistema de transferencias, pues la Ley 715 ordena que se rija por los datos del último censo, o sea 1993.Como están las cosas la representación política no es del todo representativa ya que se organiza según los números de 1985 (hasta el momento son los únicos reconocidos por el Congreso) sin tener en cuenta la movilización social de las últimas décadas. Es probable que con un nuevo censo algunos territorios ganen más curules y otros las pierdan.El desplazamiento y la migración han transformado el panorama nacional, desocupando y sobrepoblando municipios a su antojo. Al no saber cuánta gente hay ni en dónde está localizada puede ser que se estén cometiendo arbitrariedades con los recursos del Estado, al darle plata al que le sobra y al negársela al que la necesita, lo que impediría conocer el número real de pobresSoacha es el vivo ejemplo. En principio debería tener y manejar recursos para un municipio cercano a las 300.000 personas pero las autoridades creen que su población puede haber llegado ya al millón de habitantes debido al flujo de desplazados.Mientras más tiempo pasa entre censo y censo la ignorancia se hace mayor. Los analistas comparan la situación con la osadía de querer manejar un carro sin la ayuda de un manómetro que indique cuánta gasolina hay y a qué velocidad va el vehículo.A pesar de que el país se comprometió con la comunidad internacional a realizar el censo en 2000, para no afectar la comparabilidad entre países, lo cierto es que nunca ha habido plata y el gobierno de Alvaro Uribe no está tan seguro de poder encontrar los 200.000 millones que cuesta el operativo por razones de espacio fiscal. "No es que el Conpes haya dicho que no se va a hacer censo. Sólo nos pidió una mejor fecha para el operativo, en el que se encuentre un espacio fiscal adecuado para que pueda realizarse. Nosotros creemos que podría ser el último domingo de mayo de 2005 y eso nos daría tiempo de gestionar un crédito con el BID", afirma César Caballero, director del Dane, quien suspira y espera que para esa fecha finalmente haya consenso sobre la importancia del censo.