La celebración del Día de la Madre se vio marcada por un acto de feminicidio. En horas de la tarde del pasado 14 de mayo, una mujer fue asesinada por su pareja en el centro comercial Unicentro, al norte de Bogotá.
La víctima fue identificada como Erika Aponte Lugo, quien trabajaba en una pizzería del centro comercial. Por su parte, el responsable del feminicidio fue Christian Rincón, expareja de la mujer.
En horas de la mañana de este lunes, la alcaldesa Claudia López se refirió sobre el acto de feminicidio. Por medio de una rueda de prensa, la mandataria reveló detalles sobre el suceso y la investigación que se ha estado llevando a cabo.
Por un lado, reveló que ella era víctima de constantes abusos por parte de su agresor y padre de su hijo de ocho años. López señaló que durante varios años ella vivió violencia intrafamiliar, lo cual hizo que acudiera la semana pasada a la Casa de Justicia para solicitar ayuda.
“Nos dijo que tenía violencia sistemática”, reveló la alcaldesa al contar que la víctima contó todo lo que llevaba padeciendo durante varios años, incluyendo una instrumentalización de su hijo por parte de Rincón, “era francamente dramático”.
Posteriormente, la Casa de Justicia le ofreció el traslado inmediato de ella y su hijo a una casa de refugio. Sin embargo, Aponte no aceptó esa medida, porque ella ya se había ido del inmueble que compartía con Rincón en Usme. Ella vivía con su familia en Soacha, afirmando que le daba mayor seguridad estar allí.
Los funcionarios del Distrito le insistieron en que aceptara la medida, indicándole que también debía radicar la denuncia respectiva ante una comisaría de familia. Aponte siguió la recomendación y acudió ante la justicia para denunciar a su agresor.
La comisaría de Familia le impartió cuatro medidas de protección a Aponte, las cuales fueron solicitarle a su expareja cesar con los actos de violencia intrafamiliar que llevaba a cabo, acabar con la instrumentalización y manipulación que perpetraba con el menor de edad, alejarse de ella y su hijo, tanto en el municipio de Soacha como en su lugar de trabajo.
“El agresor planeó con sevicia e intencionalidad agredir a Erika dos días después en Usme”, señaló la alcaldesa al informar que Rincón estuvo vinculado a cuatro empresas de transporte y no tenía ningún antecedente penal. El último trabajo de él había sido con una empresa en la cual figuraba como conductor de servicio de transporte en Usme.
Los hechos ocurridos en Unicentro
Aquel acto de violencia desató el pánico al interior del centro comercial. Varios locales cerraron sus puertas mientras los transeúntes corrían alrededor del lugar. Por medio de redes sociales, se conocieron videos y fotografías del miedo que hubo en las personas; especialmente aquellas que también estaban en Juan Valdés y se protegieron al escuchar los disparos.
La información de las autoridades indicaron que ambos se estaban en Unicentro y Aponte estaba en las instalaciones de un punto de Juan Valdéz. En ese momento, Rincón llega al lugar, saca un arma y la desenfunda contra Aponte. Acto seguido, él intentó quitarse la vida con la misma pistola.
Según la información de las autoridades, el agresor no se encontraba trabajando, sino que tenía día de descanso. Arriba a Unicentro portando una chaqueta de guardia de seguridad privada, la cual quizás sería de un trabajo anterior. Llega al punto de trabajo de Aponte, discute con ella y sale corriendo. El desenlace termina siendo el disparo que Rincón le propina con un arma que no tenía ningún permiso de porte y uso.
Posteriormente, la Policía acudió al lugar y un grupo de investigadores tomó cartas en el asunto, recopilando los testimonios de los testigos que presenciaron el hecho, el material de las cámaras de seguridad y estudiar a fondo el caso.
Aponte falleció y horas después estando en un centro médico, el agresor del feminicidio también murió. A través de videos que circularon en redes sociales, se dieron a conocer varios momentos del suceso; desde el intento de suicidio por parte de Rincón hasta el caos que se generó al interior del centro comercial.
Con respecto al hijo de ocho años, la alcaldesa indicó que Aponte le contó a las autoridades que no se pudo trasladar con el menor de edad, debido a que no le fue permitido sacarlo de la casa donde vivió con el agresor. En ese orden de ideas, se encuentra con sus abuelos paternos en Usme.
López señaló que la Policía Metropolitana no tiene facultades para ingresar al lugar y poner bajo su disposición al menor de edad. Sin embargo, señaló que para esa tarea ya se ha puesto en marcha por parte de la Defensoría del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).