Después de arduas labores de investigación, la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional ubicaron en Medellín a José Gregorio Pérez, alias Nene Pantera, requerido con orden judicial y señalado como presunto responsable de un triple homicidio perpetrado en el barrio Luis R. Calvo de Santa Marta en febrero pasado. La investigación de las autoridades señala que alias Nene Pantera, en compañía de Tommy Joel Zerpa Brito, alias Tommy Masacre, de nacionalidad venezolana, llegaron hasta una casa y, presuntamente, asesinaron a tres personas, como represalia —según versiones— por un piropo a una mujer que los acompañaba. Las víctimas fueron Franklin Sanjuanelo, Pedro Sanjuanelo y Denis Herrán.
A través de audiencias virtuales, un fiscal de la seccional Magdalena imputó a Pérez cargos por homicidio agravado, tráfico o porte de armas de fuego y tentativa de homicidio. Un juez de garantías en Medellín aceptó la solicitud de la Fiscalía y ordenó medida de aseguramiento en centro carcelario, mientras los investigadores avanzan en la recaptura de alias Tommy Masacre, quien se fugó de las celdas de paso de la Fiscalía en Barranquilla el 18 de marzo.
Tommy Zerpa Brito, alias Tommy Masacre, en el momento en que fue presentado por las autoridaes en Barranquilla. Zerpa Brito, de 21 años, también había sido enviado a la cárcel por un juez y era investigado por su participación en otros crímenes ocurridos en la región Caribe, ya que en algunos audios revelados por las autoridades se pudo establecer que trabajaba para la organización criminal Los Costeños y que en ocasiones fiaba sus actos de sicariato.
En una de esas conversaciones, alias Tommy se refiere al triple crimen de Santa Marta y le cuenta a otro individuo, de manera escalofriante, cómo les disparó a los hombres y que lo había hecho porque estos se habían negado a pagar una vacuna de 20 millones que les habían exigido. Luego de cometer este hecho, el delincuente se refugió en Barranquilla, pero el Gaula de la Policía le siguió la pista hasta lograr su captura y remitirlo a las celdas de paso, de donde finalmente se fugó.