Julián Mateo Molina Fonseca fue capturado el pasado sábado y la Fiscalía ya le hizo dos imputaciones por dos hechos que dejaron como víctimas a hinchas de equipos de fútbol, el último ocurrido justo en la reapertura del estadio El Campín en la ciudad de Bogotá, cuando se observa, supuestamente a Molina Fonseca, mientras ataca a otra persona en forma violenta, hecho criminal que quedó en videos y cámaras de seguridad del mismo estadio.

Por este caso, la agresión al hincha de Santa Fe, en El Campín, la Fiscalía imputó el delito de tentativa de homicidio, cargos que el ahora judicializado no aceptó y se declaró inocente, a pesar de la contundencia del material probatorio, como los videos donde se observa su comportamiento.

Para el fiscal del caso, los hechos investigados son muy graves y de ahí la necesidad de una medida de aseguramiento en centro carcelario en contra de Julián Mateo Molina en aras de proteger a la comunidad y garantizar su comparecencia al proceso. “De igual forma, la Fiscalía manifiesta en el presente radicado (que) se darían dos fines constitucionales a proteger en este caso: el peligro inminente para la comunidad y de igual forma la gravedad del daño causado, existiría esa necesidad y urgencia de la medida aseguramiento en contra del proceso”, dijo el fiscal del caso.

La captura de Julián Mateo corrió por cuenta de un proceso que tenía en su contra y cuando en noviembre de 2020, en horas de la noche, en vía pública y en el sur de la ciudad de Bogotá atacó con arma blanca a otro ciudadano, nuevamente por defender su interés en un equipo de fútbol. “Se presume que, ese día, el capturado agredió con arma cortopunzante en varias partes del cuerpo al hombre, mientras este ya estaba en el suelo. Por estos hechos el Instituto de Medicina Legal le dio al joven una incapacidad de 50 días por las heridas causadas”, señaló la Fiscalía al informar la captura de este joven.

El pasado domingo la Fiscalía pidió a un juez enviar a la cárcel al proceso tras insistir que representa un peligro para la sociedad, dado que mientras avanzaba el anterior proceso y estando en libertad, aprovechó el evento deportivo de apertura del estadio El Campín para atacar a otro ciudadano que participaba de la misma actividad con la mala suerte de usar un color diferente en su camiseta, lo que al parecer motivó el ataque.

“En audiencias preliminares, se legalizó la captura y la Fiscalía formuló imputación por el delito de homicidio agravado en grado de tentativa, cargo que no fue aceptado por el procesado. Por su parte, el Juzgado 15 Penal Municipal con función de control de garantías impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario”, dijo la Fiscalía.

Para el caso ocurrido el 3 de agosto en el estadio Nemesio Camacho El Campín, el fiscal del caso resaltó la gravedad y peligrosidad del procesado al punto de insistir que la medida de aseguramiento en centro carcelario es urgente dado sus antecedentes.

“No es la primera vez que se encuentra en estos líos judiciales y por eso hay que indicar los procesos que tiene en su contra como los ocurridos en noviembre de 2020 por el delito de tentativa de homicidio; son elementos de prueba donde agredió con arma blanca a otro ciudadano y, por esa misma situación, otro juez legalizó su captura y ordenó una medida de aseguramiento, lo que indica claramente que el ciudadano es reincidente. Esto quiere decir que no le importa la vida de los demás ciudadanos”, dijo el fiscal.