Así como el estadio El Campín ha albergado a deportistas, artistas, fanáticos y amantes del futbol, al parecer también sería el hogar de varias entidades paranormales que han asustado a las personas que trabajan en el lugar.

Y es que por estos días se viralizó el relato de uno de los trabajadores del estadio, que aseguró haber sido testigo de la aparición de siete entidades paranormales, y todo esto habría ocurrido en medio de un corte de luz que ocurrió en la madrugada.

Las siente entidades paranormales que se aparecieron en El Campín

La historia la dio a conocer Howard Gutiérrez, de Conexión enigma, página enfocada en relatos sobrenaturales, quien manifestó que hace un tiempo un trabajador de El Campín se acercó a él para desahogarse y relatarle un evento paranormal del que había sido testigo.

Selección Colombia Femenina de Mayores Colombia vs. Nueva Zelanda Preparación para los Juegos Olímpicos de París 2024 Hinchada colombiana Estadio Nemesio Camacho El Campín hinchas Bogotá, diciembre 2 de 2023 Foto: Guillermo Torres Reina / SEMANA | Foto: Guillermo Torres Reina

“Trabajó hace mucho tiempo en este lugar, pero relata lo siguiente, y es que, en horas de la noche, ya más o menos de la madrugada, les ocurrió –no solo a él, sino a varias personas que trabajaban esa misma noche– un hecho sobrenatural y paranormal”, fueron las palabras con las que inició el relato.

Continúa comentando que todo le ocurrió a un hombre que trabajaba en el lugar y era de pocas amistades, por lo que era víctima de las bromas de sus compañeros, que lo asustaban escondiéndoles las herramientas o haciendo ruidos raros, excusando los eventos de ser productos de entidades fantasmales.

Pero estas bromas terminarían haciéndose realidad aquella madrugada en la que tanto él como sus compañeros verían algo que no podían creer.

“Así pasó esa madrugada, cuando el trabajador comenzó a volver a sentir estos golpes en las puertas, que le pasaban cosas extrañas; sus elementos de trabajo también comenzaron a desaparecer, a perderse, y él pensó que eran sus compañeros, pero en esta ocasión no era así. Él no era el único que estaba viviendo hechos sobrenaturales aquella madrugada. Por esa razón, él salió a hacerles el reclamo a sus compañeros para que lo dejaran de molestar, porque estaba muy cansado”, continúa comentando el creador de contenido.

Comenta que del reclamo solo quedaron las ganas, ya que al salir a buscar a los otros trabajadores, se percató de que estos estaban paralizados en las gradas, con la mirada fija hacia la cancha, por lo que sin entender muy bien fue a ver qué pasaba.

Gran susto se llevó cuando se percató que lo que sus compañeros veían era la presencia de siete entidades vestidas de negro.

“Cuando él va a averiguar qué está ocurriendo o qué están viendo sus compañeros, por qué están tan quietos, con la mirada perdida en el campo de fútbol, ve a siete personas vestidas de negro, de pie, en el campo de juego”, manifiesta en el relato Gutiérrez.

A pesar de las multimillonarias cifras por usar El Campín, la gramilla no está en óptimas condiciones. Foto: Guillermo Torres / SEMANA | Foto: Semana

Según comenta, al ver eso pensaron que eran siete personas bromistas que se habían logrado infiltrar en el estadio, pero “estas personas emitían una energía muy pesada y todos los presentes, los trabajadores, eran incapaces de moverse del lugar. Tenían mucho miedo”.

Lo peor del caso habría sido que estas entidades, que vestían túnicas largas y capuchas, empezaron a actuar de extraña manera, moviéndose por diferentes puntos de la cancha e incluso empezando a cavar un hueco.

“El comportamiento de estas personas fue bastante curioso, porque cuatro de ellos se hicieron en las esquinas de la cancha, mientras que los otros comenzaron a cavar en la mitad del campo de juego. La persona que nos cuenta esta experiencia dice que él quiso salir corriendo, pero el miedo no lo dejó y tuvo que ver prácticamente todo lo que ocurría a su alrededor, sin poder hacer nada”.

Y aunque uno podría pensar que ahí acaba todo, la historia continúa, ya que de un momento a otro las luces de El Campín se apagaron, quedando iluminados los ojos de las entidades, que miraban fijamente a los trabajadores.

El creador de contenido finaliza el relato comentando que “cuando la luz regresó, estos sujetos ya no estaban, no estaban las figuras, ni el supuesto agujero que estas mismas entidades estaban cavando en el centro del terreno. Por supuesto, ellos pensaron que pudo haber sido una alucinación colectiva, o una alucinación de la persona que cuenta esta historia y buscaron respuestas en las cámaras de seguridad, pero no apareció prácticamente nada, no se vieron estas figuras extrañas y lo único que se apreció fue que todos los trabajadores estaban ahí quietos, mirando hacia el campo”.