En las últimas horas, la Contraloría de Bogotá anunció 12 hallazgos con incidencia fiscal por 16.804 millones de pesos, al igual que 36 hallazgos administrativos y 12 con presunta incidencia disciplinaria, en el más reciente informe de auditoría practicado a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá.
De acuerdo con el contralor Distrital, Julián Mauricio Ruiz, el mayor hallazgo, en cuantía cercana a los 7.573 millones de pesos, se detectó en la Planta de tratamiento Salitre, Planta de Tratamiento Canoas y Estación Elevadora Canoas, así como en el interceptor Tunjuelo–Canoas que lleva las aguas a la estación elevadora; obras que hacen parte del Sistema de Alcantarillado de Aguas Residuales del Distrito.
“El equipo auditor determinó que obras no ejecutadas u obras faltantes del interceptor Tunjuelo Canoas, incluyendo cámaras y pozos de inspección, así como parte de la estructura del túnel de emergencia y obras complementarias que no se realizaron, y generaron detrimento a las arcas del Distrito”, afirmó el contralor Ruiz.
Se trata de un contrato llave en mano, en el que el contratista es el responsable del diseño y de la construcción; es decir que debió realizar todos los trabajos necesarios para la puesta en marcha del sistema por un precio acordado en un tiempo determinado.
Al respecto, el Acueducto le respondió a la Contraloría afirmando que la ampliación de la Planta de Tratamiento Salitre no formó parte del informe que el organismo de control entregó a la EAAB e indicó que el contrato de optimización de esta planta, está a cargo de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR).
Ahora, frente a lo sucedido en Tunjuelo Canoas, el Acueducto enfatizó: “Entre los proyectos de Saneamiento del Río Bogotá se encuentran: la construcción de la Estación Elevadora Canoas y de Tratamiento de Aguas Residuales Canoas, así como los interceptores Tunjuelo–Canoas. Sobre este último, la EAAB inició las acciones judiciales requeridas para que el contratista respondiera por el incumplimiento del contrato”.
La empresa agregó que en 2014 el Consejo de Estado ordenó a la EAAB terminar las obras faltantes. Actualmente, los interceptores Tunjuelo–Canoas están terminados y listos para entrar en operación cuando la Estación Elevadora esté en funcionamiento.
Por otro lado, el contralor Julián Ruiz explicó que otro hallazgo fiscal determinado dentro de la auditoría tiene que ver con el pago de intereses y sanciones por mora por impuesto predial pagado de manera extemporánea, es decir, fuera del plazo establecido por la Secretaría de Hacienda Distrital y que corresponde a las vigencias 2012, 2016, 2017, 2018 y 2021, por cuantía aproximada a los 4.030 millones de pesos.
Frente a este tema, el Acueducto indicó que se encuentra en proceso de depuración predial y cumpliendo con sus obligaciones tributarias. Acciones que se han venido realizando por recomendación de la misma Contraloría.
De acuerdo con la auditoría de la Contraloría, los restantes hallazgos, por una cuantía cercana a los 9.231 millones de pesos, tienen que ver con inconsistencias y desactualización en reporte de información de macroproyectos, incoherencia en la articulación de las metas de macroproyectos, deficiencia de los productos de diseño, deficiencias en diseños, deficiencia en planeación, contratación de obras sin permisos, una sanción impuesta por la Superintendencia de Servicios y una multa impuesta por la Corporación Autónoma Regional, CAR, entre otras.
En relación con este último apartado, la Empresa de Acueducto dejó claro que “las auditorías de los organismos de control permiten revisar los procesos al interior de la Empresa, para mejorar la ejecución de los proyectos, ser más eficientes y garantizar la prestación del servicio”.
La entidad puntualizó que “siempre estará presta a los llamados de los organismos de control y la ciudadanía”. Y añadió que “seguirá trabajando por la ciudad, para impulsar los proyectos que mejoren la prestación del servicio y reactiven la economía de la capital”.