Ante el Juzgado Cuarto Penal del Circuito con funciones de conocimiento, la Fiscalía General de la Nación acusó de manera formal al sacerdote José Fredy Martínez Cruz, investigado por presuntamente haber abusado de tres mujeres en Ibagué.
La diligencia fue adelantada a través de un despacho delegado ante el Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas), de la Seccional Tolima.
Al acusado, que la Iglesia católica suspendió de sus funciones, le fueron imputados los cargos de acto sexual violento, acto sexual con persona puesta en incapacidad de resistir y acceso carnal con persona puesta en incapacidad de resistir, los cuales fueron ratificados en audiencia de acusación. Su captura estuvo a cargo de funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI).
Martínez Cruz, reconocido por sus misas de sanación en una iglesia del corregimiento de Villa Restrepo, ubicada a las afueras de la capital tolimense, lideraba además un grupo de oración.
Durante los momentos denominados de unción habrían sucedido estas agresiones sexuales cuando, al parecer, eran doblegadas las víctimas por el sacerdote.
Se trata de mujeres entre 19 y 22 años, en hechos ocurridos entre los años 2007 y 2013. La audiencia preparatoria de cara al juicio se fijó para el 21 de enero del año 2022.
En julio de 2021, la Fiscalía indagó sobre lo escrito a través de Facebook por una de las presuntas víctimas del sacerdote y la contactó. En entrevista con dicha institución, reveló que era violada por Martínez desde los 13 años, cuando empezó a acudir a su grupo juvenil religioso. También contó que otras seis mujeres habrían sido abusadas sexualmente por el clérigo.
En la red social la víctima habría escrito: “He callado sobre abusos de quien fue mi pastor en algún momento. Intento de violación a mis 13 años cuando ingresé al coro, testigo de su abuso jerárquico con muchas mujeres”, así comienza la publicación la mujer tolimense, la cual se hizo viral hace algunos meses.
“Yo le tenía miedo al padre Martínez: me violaba seguido y cuando me intentaba defender me echaba gas pimienta o me pegaba con una pistola de electrochoques”, reza la declaración de una de las abusadas.
Otra de ellas aseguró: “Me hacía quitar la blusa para pegarme con hojas de ortiga, mientras se burlaba”.
Tras recopilar material suficiente, los agentes del CTI de la Fiscalía General de la Nación capturaron el pasado 3 de julio en el sector de El Vergel, en Ibagué, al padre Martínez Cruz, de 49 años.
El 27 de junio, la Fiscalía ya había capturado a otro sacerdote por delitos similares, ocurridos en Cartagena. El cura Christian Mercado, de 34 años, supuestamente se aprovechó de una joven de 15 años, que venía siendo objeto de acoso escolar y cuya madre acudió al presbítero en busca de guía espiritual.
“El párroco le pidió a la madre autorización para que la niña lo acompañara a entregar mercados (...) En una de esas ocasiones, cuando se quedaron solos en la casa cural, el sacerdote habría agredido sexualmente a la menor. Esta situación, al parecer, se presentó de manera recurrente. El procesado aparentemente intimidaba a la víctima, diciéndole que por ser voluntaria de la Iglesia debía callar lo sucedido”, detalló la Fiscalía.
Como en el caso de Martínez, el cura Mercado tampoco se allanó a los cargos, por lo que fue enviado a la cárcel de La Ternera, en Bolívar.