Una mujer que se desempeña como agente civil siguió al profesor de inglés de la esposa del general Luis Manuel Ospina, comandante del Ejército. Su misión, según describió ella en entrevista con Vicky Dávila, era “levantarnos todos los días para saber dónde estaba el man”. La agente de contrainteligencia contó muchos detalles del operativo que le tocó seguir contra el docente, a quien le llamaban “el teacher”. “Sí o sí tenemos que encontrarlo”, le decían.

Ella, cumpliendo órdenes de sus superiores, tuvo a su cargo la misión de seguirles los pasos al hombre y ganarse su confianza. Narra que lo ubicó y buscó tomar clases con él. Hoy dice que está dispuesta a contarle todo a la Fiscalía.

¿Qué le dice hoy al comandante del Ejército?, le preguntó Vicky Dávila. La respuesta de ella fue contundente. “Que si él dio esa orden, que la asuma”, dijo.

“Que asuma, si él dio la orden. Él sabe cómo la dio y por qué”, reiteró.

La mujer asegura que ella solo siguió instrucciones. “Cumplimos con la orden que nos dieron los jefes. Que se haya tergiversado ya es algo entre el comandante del Ejército y al que él le dio la orden”, aclara.

La mujer contó que recibió las órdenes “con base en un tema de seguridad de un mando superior”. Y que le pidieron “ubicarlo, saber qué hacía, dónde vivía, si ingresaba o no al cantón militar”.

General Luis Ospina, comandante del Ejército Nacional. | Foto: COLPRENSA ©

Principalmente, lo que buscaban era saber si el profesor “ingresaba y si tenía contacto con ella (la esposa del general) dentro del Cantón”.

Sin embargo, aclaró que las pesquisas no tuvieron éxito. “Nada, del señor nada. De él no se encontró nada. Solamente un encuentro en la unidad militar del Cantón Norte”.

La agente detalló que para seguir al profesor se utilizaron “los métodos que se utilizan en contrainteligencia. Tomar contacto con personal que nos pueda brindar información de ese particular”.

“Las personas que hacíamos los acompañamientos y la búsqueda de información no tenemos conocimiento de eso. Nosotros simplemente nos basamos en una orden que dan directamente los mandos: ‘Vaya, haga, busque, encuentre y dígame lo que está haciendo y cómo lo está haciendo’. Y ya”, agregó.

Portada de SEMANA: El general contra el 'teacher'. | Foto: Semana

“Eran órdenes diarias sobre ‘qué pasó, por qué no lo han encontrado, por qué no saben dónde vive, por qué no saben si se ve en los cantones’. Eso era únicamente lo que hacíamos con los medios que teníamos”, dijo.

Aseguró que “uno empieza a quemar las opciones que tiene. Una de esas fue si él no aceptaba, se decidía una invitación, pero él no accedió a nada de eso”.

La agente confesó que tiene temor de las “represalias que tome el Ejército” en su contra. Aseguró que decidió dar la entrevista porque “en ningún momento sabía que eso era ilegal”.

Agregó que se siente “traicionada” porque el comandante del Ejército asegura que la culpa de lo que ocurrió es de quienes trabajaron en el operativo. “Él en este momento está diciendo que la culpa es de nosotros”, detalló. Y que está comprometida a contar lo que sea necesario ante las autoridades.