La Coalición Contra la Vinculación de Niños, Niñas y Jóvenes al Conflicto Armado en Colombia (Coalico), entregó el boletín de monitoreo, niñez y conflicto armado en Colombia No. 29, del Observatorio de Niñez y Conflicto Armado (Onca) de la Coalico, el cual recopila información acerca de las afectaciones y vulneraciones que se presentaron contra niñas, niños y adolescentes entre el 01 de enero y el 30 de junio de 2023, por causa del conflicto armado y las violencias relacionadas.
La revelación de este boletín coincide con la conmemoración del Día Internacional para Proteger la Educación de Ataques, que se conmemora el 9 de septiembre, y del Día Internacional de la Paz, que se realiza el 21 de septiembre, “en un escenario desalentador y en un panorama hostil donde, por ejemplo, los ataques a la educación o ataques y ocupación de escuelas, hospitales y otros bienes civiles, se registraron en al menos 34 eventos que afectaron a por lo menos 11.977 niñas y niños en todo el país”.
El informe detalla que, “en el mismo sentido y en vía contraria a la esperanza de alcanzar la paz”, en lo que se refiere al reclutamiento, utilización de personas menores de 18 años, edad por actores armados, se pudo identificar que durante el primer semestre del año en curso (2023), “51 eventos con afectación directa a por lo menos 151 niñas y niños; situación que contrasta con el registro del primer semestre del año 2022, donde se identificaron 42 eventos con alrededor de 85 niñas y niños víctimas”.
De acuerdo con información presentada por la Representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, “En el primer semestre del año, la Oficina recibió 57 alegaciones de reclutamiento, uso o utilización de niñas, niños y adolescentes por parte de grupos armados no estatales, de los que a la fecha ha verificado 48 casos y nueve se encuentran en proceso de verificación. En 25 de los 48 de casos verificados en el primer semestre de 2023, las víctimas eran indígenas (17 niños y seis niñas) y en dos de los casos los afectados son afrodescendientes (un niño y una niña)”.
Por su parte, el Onca, en lo corrido del 2023, identificó que aún persisten las vulneraciones contra las niñas y niños, así como el desplazamiento forzado, bloqueo de suministros y las violaciones e infracciones contra el derecho a la vida e integridad personal.
El informe señala que, en cuanto a la distribución territorial de las afectaciones, el primer semestre del año registro que los eventos principalmente se produjeron en los departamentos de Antioquia, Cauca, Chocó, Nariño y Valle del Cauca.
“Preocupa que durante este periodo, por lo menos en 26 de los 32 departamentos del territorio nacional, se registró algún tipo de vulneración por parte de actores armados contra la niñez y la adolescencia”, dice el documento.
En este escenario, detallan que es urgente que todos los grupos armados atiendan el llamado de cesar de inmediato las acciones que ponen en riesgo la vida de las niñas, niños y adolescentes, y que van en contra del Derecho Internacional Humanitario, así como la normativa nacional que proscribe este tipo de actos.
“Los Estados partes deben adoptar medidas legislativas tendientes a proteger al niño contra toda forma de perjuicio o abuso físico o mental, descuido o trato negligente, malos tratos o explotación, incluido el abuso sexual, mientras el niño se encuentre bajo la custodia de los padres, de un representante legal o de cualquier otra persona que lo tenga a su cargo”.
Llamado al Gobierno
La entidad señala que frente a las cifras registradas y eventos que persisten en varias zonas del país “hacemos un llamado al Gobierno nacional para seguir avanzando en la toma de decisiones y medidas, necesarias y contundentes, para responder a la creciente ola de violaciones de los derechos humanos de las niñas y niños, en especial, frente a la vinculación de ellas y ellos ya sea por reclutamiento y uso, así como de las demás graves violaciones como la violencia sexual, ataque y ocupación de escuelas y bienes civiles, secuestro, violación del derecho a la vida, bloqueo de suministros y servicios básicos, y desplazamiento forzado”.