El alcalde de Buenos Aires, Cauca, Óscar Eduin López Sánchez, no vacila en entregar hipótesis sobre el atentado que sufrió el sábado en la noche. "Me querían matar, no hay duda de eso", dice. La camioneta en la que se movilizaba hacia el corregimiento de La Balsa recibió cuatro disparos en la parte trasera. El conductor aceleró por orden del alcalde. López Sánchez sabía que en la zona no había combates y que esos disparos eran intencionales. Al llegar al corregimiento donde haría una reunión caminó pocos metros, pero el miedo no lo dejó avanzar más, la comunidad alertada de lo ocurrido destinó un sitio como refugio y esperaron en ese lugar por más de dos horas hasta que llegó el Ejército a sacar al mandatario de la zona.  El alcalde viajaba con el asesor jurídico del municipio y el escolta asignado por la Policía Nacional. El encuentro en La Balsa había sido ampliamente difundido en días anteriores, por eso los criminales aprovecharon la única zona despoblada y con poca iluminación de Buenos Aires a La Balsa: el sector Alto del Indio, una vía angosta incrustada entre las montañas que metros más adelante conecta con el municipio de Suárez. 

“Fueron momento de zozobra y temor”, puntualiza el alcalde. Por eso, agrega, decidió abandonar el municipio hasta tanto no se realice un estudio completo de seguridad. “Siento bastante miedo y estoy atemorizado, primera vez que me suceden este tipo de acontecimientos. Desde el domingo fue reforzada mi seguridad, pero aún persiste el temor. He tomado la decisión de atender y despachar desde Popayán (a dos horas en carro desde Buenos Aires)". Un corredor estratégico Buenos Aires está ubicado en el noroccidente del Cauca, limita con Suárez y se encuentra sobre la vía que de Jamundí, Valle, conduce al camino selvático que abre las puertas del Pacífico a través del Naya. Según información de inteligencia militar, en esa zona opera la columna disidente Jaime Martínez, bajo el mando de Jhoany Noscué, alias Mayimbú.  El paso es estratégico para sacar cocaína hacia el pacífico caucano, donde es vendida, según cifras de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito, a $12 millones el kilo. Mayimbú controla ese corredor, incluida el área rural de Jamundí que alberga alrededor de 1000 hectáreas de hoja de coca. Sin embargo, la otra columna disidente Dagoberto Ramos que opera en el norte del Cauca quiere adueñarse de municipios clave para el transporte de la droga como Buenos Aires y Timba. Incluso, esta última estructura criminal rebautizada Segunda Marquetalia se atribuyó el ataque al alcalde López Sánchez, como una supuesta advertencia para acelerar la pavimentación de la vía Buenos Aires - Palo Blanco. No es la primera vez que grupos al margen de la ley siembran terror en Buenos Aires. En 2015 miembros de las Farc lanzaron artefactos explosivos contra una escuela donde acampaban militares, 15 jóvenes soldados murieron. Cuatro años después, el expresidente Juan Manuel Santos reveló en el libro ‘La Batalla por la paz’ que ese hecho estuvo a punto de romper los diálogos en la Habana, Cuba.  “No sé por qué me quiere matar” El alcalde de Buenos Aires conciente de ese antecedente criminal afirma que no es posible alcanzar la paz solo con presencia militar. “Necesitamos una intervención social permanente del Estado”. Explica que en el municipio hay zonas rurales donde el orden público es bastante complejo.  Óscar Eduin López Sánchez, del partido de la U, ganó la Alcaldía de Buenos Aires con 4853 votos (49 por ciento del total de los votantes), su principal contendor el liberal Adán Díaz Sandoval obtuvo 4149 sufragios. En campaña prometió seguir trabajando por el proceso de paz y brindar garantías a la zona Territorial de Capacitación y Reincorporación de exguerrilleros de las Farc que aún está instalada en el municipio.  Nunca recibió amenazas por eso, ni por ningún otro motivo. “Estoy preocupado y con mucha zozobra. No sé por qué me quieren matar si apenas llevamos 27 días en el cargo”. El caso de López Sánchez se asemeja al vivido por el entonces alcalde de Corinto, Cauca, Edwin García en el segundo semestre del 2019, quien también abandonó el municipio por amenazas y se radicó en Cali. Semanas después la columna Dagoberto Ramos secuestró a su hermano menor, Cristian García, y lo mantuvo privado de la libertad por más de dos meses en las montañas de ese departamento.  En Suárez, municipio vecino, el panorama no es diferente. Una vez terminados los comicios del 27 de octubre, el actual alcalde Ronald Villegas señaló que sentía miedo al salir de su casa. El mandatario recogió las banderas políticas de Karina García, candidata liberal asesinada junto a seis personas en el corregimiento La Betulia a manos de miembros de la columna Jaime Martínez.