Mientras el barranquillero Álex Saab espera el veredicto final del juicio que enfrenta por lavado de activos, desde la celda en la que permanece detenido en Miami, se siguen conociendo detalles reveladores de su turbio entramado.
Un informe publicado por Armando.info, un medio de comunicación que se dedica al periodismo investigativo y cuyos trabajos han sido merecedores de premios como el Pulitzer, saca a la luz pública la existencia de una oficina operada desde la capital rusa, a través de la cual Álex Saab gestionaba sus negocios.
A partir de fotografías, entrevistas y fuentes documentales dieron cuenta del funcionamiento de la sede desde donde Saab continuó con sus movimientos aún estando en la cárcel. Entre las revelaciones que surgieron de este trabajo se destaca la labor de una ficha hasta entonces desconocida en el tablero del testaferro de Nicolás Maduro.
Los negocios de Álex Nain Saab Morán quedaron en manos de María Camila Ballen Hernández, una joven oriunda de Cúcuta, ciudad fronteriza con Venezuela.
A su cargo, funcionaba la oficina cercana a la famosa Plaza Roja de Moscú, que no se detuvo, ni siquiera tras la captura del colombiano en junio de 2020, en Cabo Verde.
La mujer de 27 años “ha sido la encargada de las finanzas en la oficina y de la familia de Saab en Rusia”, como la describió una de las fuentes consultadas por Armando.info.
Muy lejos de su tierra natal, los colombianos se encontraron para ‘hacer negocios’.
“Antes de la detención del magnate barranquillero, Álex Saab y María Camila Ballen mantenían comunicación mediante chats de la red social rusa Telegram. Algunas de las millonarias transacciones bancarias se reportaban en un dispositivo consagrado exclusivamente a ello, como por ejemplo, la realizada el 6 de marzo de 2021: “Código 33133232 para firmar un pago por un monto de 89.000.000 de rublos 000”, detalla la investigación de Armando.info.
Como detalla el medio de comunicación, las tareas de Ballen eran varias, desde mantener a flote las compañías fachadas que servían para seguir moviendo dineros hasta enviarles el ‘respectivo salario’ a la familia de Saab, por su participación en las directivas de las compañías a su cargo.
A su nombre, también se registraron distintas empresas que servían para encubrir las operaciones de Saab e inclusive para seguir negociando el petróleo de Venezuela, junto a Álvaro Pulido. Loran, Stormi, Neptuno, Proton, Hades y Puls Llc son algunas de las sociedades en las que figura María Camila Ballen.
Estas movidas continuaron incluso luego de la detención del gran testaferro, puesto que el material hallado dio prueba de una transacción por un millón de rublos, provenientes de “la venta de las acciones de la compañía Mulberry Rus a Elvira Vladimirovna Shevchenko, una ciudadana que repite como miembro de la directiva en otras de las sociedades rusas del empresario colombiano”, detallan.
Inclusive, en su vivienda recibía la correspondencia que le era enviada Camila Fabri, esposa de Álex Saab, desde Venezuela, tras la detención del empresario. Estas interacciones dan muestra de la cercanía que llegó a alcanzar Ballen con la familia.
La joven colombiana “no contestó las peticiones de entrevista que se le formularon por vía del correo electrónico, ni los mensajes directos enviados a sus redes sociales. Tras los contactos, cambió su foto de perfil”, indicó el portal. Por el momento, María Camila Ballen permanece en Moscú.
La sede en Moscú
Huyendo del mazo de la justicia, el barranquillero había dejado huellas en varios países, como Malta, Panamá, Hong Kong, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos, donde hizo lo propio: ubicó sus compañías y operó sus ilícitos negocios.
Sobre la oficina, la investigación del medio venezolano indicó que estaba localizada en una zona aledaña a la tradicional y popular Plaza Roja, en la calle Nikolskaya. Desde allí, el contratista del régimen de Maduro y su equipo lideraban un entramado que les posibilitó llevar a cabo sus planes. “Grandes transacciones bancarias, fajos de euros y dólares que se almacenaban en una caja fuerte, y hasta fiestas, todo pasaba por y en ese lugar”, resaltaron.
También se llevó a su esposa
Luego de que se le vinculara con los turbios negocios de su esposo, Camilla Fabri no tuvo otra opción más que seguirle los pasos y alcanzarlo en la capital de Rusia, donde se resguardó del ojo de la tormenta.
“Fabri vivió en un apartamento de la calle Nashchokinskiy, también cerca de la Plaza Roja y no muy lejos de la oficina en Nikolskaya, pero más próxima al cauce del río Moscú. Allí permaneció hasta la extradición de Saab a Estados Unidos, que se ejecutó el 16 de octubre del año pasado”, reveló la investigación.
No fue la única, en la dichosa oficina también se presentaron Luis Saab, su hermano, y sus hijos mayores, Shadi e Isham Saab, según señaló el material conocido.