La reforma política aprobada en cuarto debate esta semana, y que espera cuatro votaciones más el próximo año, mostró una fuerte división en el interior de la coalición de Gobierno. En el último debate en la Cámara y sin titubeos, la Alianza Verde se opuso a casi todo el articulado, lo cual fue interpretado por el Pacto Histórico como un plan malintencionado para hundir el proyecto.

La primera en pronunciarse fue la representante Katherine Miranda, una de las más fieles escuderas del presidente Gustavo Petro. “Tengo dolor, vergüenza y una profunda decepción”, manifestó la congresista, quien se quejó por la aprobación del artículo que permite que los partidos grandes puedan conformar coaliciones, algo que disminuiría a las colectividades pequeñas.

Casi en simultánea, otros representantes de los verdes criticaron puntos clave de la reforma: el transfuguismo, la posibilidad de que los congresistas sean ministros y la inconveniencia de las listas cerradas. Les apuntaron al presidente y a los ministros. Y al mismo tiempo cuestionaron si se está cumpliendo con la promesa de cambio que se hizo en campaña.

Esta rebeldía habría sido pasada por alto por el ministro del Interior, Alfonso Prada, quien en conversación con SEMANA dijo: “No respondo situaciones personales emotivas. Lo que sí respondo son los argumentos”.

En el Congreso se vive una guerra entre ambos partidos producto de la reforma política. | Foto: GUILLERMO TORRES

Sin embargo, los ataques contra algunos artículos de la reforma no pararon ahí. Otros legisladores verdes, en cabeza de Duvalier Sánchez, sacaron a relucir una disposición que haría que la conformación de listas a corporaciones públicas privilegie a los actuales congresistas. A raíz de esto, la representante Catherine Juvinao dijo que se pretendía legislar en causa propia y presentó un impedimento para votar la conciliación de la reforma.

Fue ahí cuando el Pacto Histórico, la plataforma política de Petro, reaccionó señalando a sus compañeros de la coalición oficialista de intentar “sabotear” el proyecto. Varios, como las representantes María del Mar Pizarro y Luz María Múnera, culparon al senador Ariel Ávila, de la Coalición Centro Esperanza-Alianza Verde, por meter este mico como una estrategia para “tumbar” la iniciativa.

Ávila, quien parecía de los más cercanos al petrismo, fue contundente en responderle al Pacto Histórico: “El sicariato moral por parte de algunos sectores que dicen ser progresistas es lo más bajo y miserable”. Incluso, aseguró que la representante Pizarro ha tenido una gestión “pobre y mala” y que para intentar figurar “debe calumniar”.

Los roces del Pacto Histórico con los demás congresistas han ido en aumento las últimas semanas.

Susana Boreal, representante del Pacto, también atacó y le apuntó directamente a la congresista Miranda, a quien acusó de “desinformar por likes”. Catherine Juvinao salió en defensa de su copartidaria: “Cuando usted gane una curul con su propio mérito y votos, entenderá”, le dijo a Susana Boreal.

En medio de todo, hay que decir que las discrepancias entre la Alianza Verde y el Gobierno no son nuevas, pero se intensificaron con el enfrentamiento con la bancada del Pacto Histórico. El presidente Petro, desde su elección, no ha otorgado un espacio para una reunión con todos los congresistas verdes. Pero esta crisis parece haber forzado ese encuentro, el cual está previsto para el lunes, cuando todas las inconformidades saldrían a la luz.

“Lo de hoy pasa una línea roja”, manifestó Carolina Giraldo, representante por la Alianza Verde, quien pidió atención del Gobierno frente a las posiciones programáticas del partido. “Los mejores aliados del presidente son quienes le recuerdan la promesa de cambio que hizo y lo seguiremos haciendo desde la Alianza Verde”, opinó Duvalier Sánchez.

Y, aunque muchos ven la rebeldía de los verdes como un desmarque estratégico de cara a las elecciones regionales del próximo año, otros lo perciben como las primeras diferencias de fondo con la plataforma que acompañó al presidente con una ilusión de cambio real en las costumbres políticas del país.