Algunos dirigentes de la Alianza Verde hacen un esfuerzo para evitar que la colectividad se divida de cara a las elecciones presidenciales de 2022.
Aunque para las elecciones de Congreso el tema no es tan complejo y sería más fácil de resolver, el apoyo al candidato que pretenda llegar a la Casa de Nariño es más difícil, lo suficiente para mantener a la colectividad en una sostenida fricción desde hace varias semanas.
La senadora Angélica Lozano habló de escisión, pero su propuesta de hacer tolda aparte no tomó fuerza porque varios congresistas no la apoyaron por la incertidumbre que genera la decisión a siete meses de las elecciones parlamentarias. El tema aún sigue sobre la mesa.
La concejal de Bogotá de la Alianza Verde Lucía Bastidas pidió este lunes a las directivas de su partido dejar en libertad a sus integrantes de apoyar al candidato presidencial que consideren.
“Unos están con Sergio Fajardo, otros con Carlos Amaya, unos más con Gustavo Petro, otros con Alejandro Gaviria, Camilo Romero y Enrique Peñalosa”. Para Bastidas “el camino debe ser la libertad. Aquí nadie puede imponer nada. Así se simple”, dijo Bastidas.
La propuesta de la concejal tomó fuerza después de que Juanita Goebertus, representante de la Alianza Verde, abandonó a Sergio Fajardo y se fue a la campaña del exrector Alejandro Gaviria, sin importarle que internamente hay seis precandidatos presidenciales en los verdes.
A propósito de Fajardo, el antioqueño aún sostiene un grupo de apoyo, entre ellos, el concejal de Bogotá, Martín Rivera Alzate, y el congresista, Mauricio Toro, quien aunque no le disgusta la candidatura de Alejandro Gaviria prefiere esperar y examinar si la aspiración del académico toma fuerza, o al contrario se desinfla en cuestión de semanas.
El exgobernador de Boyacá Carlos Amaya avanza en su campaña presidencial y este fin de semana concentró a un grueso de electores en Bogotá. Lo acompañó la senadora Angélica Lozano, aunque internamente se cree que ella, al igual con la alcaldesa Claudia López, tienen cercanía con Alejandro Gaviria.
Gustavo Petro -quien estuvo en su momento en el Verde- conserva una fanaticada en el partido, especialmente por parte de los congresistas Inti Asprilla, León Fredy Muñoz, Katherine Miranda, y el exgobernador Camilo Romero, también precandidato presidencial. Mientras el precandidato Enrique Peñalosa tiene el apoyo de la concejal Lucía Bastidas.
Cosa contraria ocurre con el senador Jorge Eduardo Londoño, precandidato presidencial, un hombre que se ha mantenido neutro en sus posiciones y quien de momento no está ni en la Coalición de la Esperanza ni en el Pacto Histórico.
Aunque la opción de dejar en libertad a la Alianza Verde podría ser una alternativa democrática para zanjar las diferencias internas, hay un grueso de dirigentes que no lo ve conveniente porque no creen que sea bien visto que el logo esté en los partidos de izquierda, el centro y hasta en la centro derecha.
De momento, las directivas no han tomado una decisión oficial, pero cualquiera que sea, impactará las presidenciales del 2022.