Crece la polémica en el país por cuenta de las declaraciones que ha dado y quiere entregar Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, en instancias como la Comisión de la Verdad y la JEP. La incógnita ahora se cierne sobre si será o no enviado a Estados Unidos pues evidente que la estrategia de defensa es que se quede en Colombia aunque no sería viable porque continuó delinquiendo después de 2017.

Abogados como Francisco Bernate señalan que, en todo caso, es clave que Otoniel siga aportando verdad en diferentes escenarios judiciales para este fin, pero aclara que él “no es un candidato para acogerse al sistema integral de verdad, justicia y reparación en la medida que continuó delinquiendo después del 2017, su oportunidad para presentarse ante esta jurisdicción ya pereció y dado que sus conductas delictivas trascendieron los límites de nuestro país, por supuesto, pues no hay impedimento para que Colombia haga el trámite respectivo y pueda ser enviado a Estados Unidos para que responda como debe ser, y pague por sus delitos. No hay argumento ni posibilidad que él pueda tener para frenar esa extradición”.

De su puño y letra, Otoniel mandaba las órdenes a sus comandantes mediante correos humanos. No usaba computadores, sabía que podrían significar su caída.

Fuentes de la Corte le confirmaron a SEMANA que la petición de extradición se encuentra en el despacho del magistrado Diego Eugenio Corredor, de la Sala de Casación Penal, quien ya ordenó el trámite de varios asuntos para definir si existen méritos para avalar o no la petición de extradición de Otoniel.

Como primera medida, se le solicitó a la Dirección de Asuntos Internacionales de la Fiscalía General que remita los informes realizados por las unidades delegadas contra la Criminalidad Organizada, Seguridad Ciudadana, Finanzas Criminales y la Dirección de Apoyo a la Investigación y Análisis contra la Criminalidad Organizada, frente a los reportes y documentos de información que se encuentran en las plataformas SPOA Y SIJUP en referencia a Dairo Antonio Úsuga David.

Igualmente, se le pidió a la Dirección de Asuntos Internacionales del Ministerio de Justicia el reporte sobre la comunicación hecha a Úsuga David sobre el procedimiento de extradición que se adelanta en su contra y los hechos por los cuales es requerido por una Corte de Estados Unidos. Además, el despacho del magistrado ya avaló y comunicó los poderes entregados a los abogados que representarán al jefe del Clan del Golfo en este trámite.

Otoniel fue capturado el pasado 24 de octubre en un operativo adelantado por el Ejército, la Policía y la Armada en el Urabá antioqueño, exactamente en el cerro Yoki, ubicado entre Necoclí y San Pedro de Urabá, se encuentra recluido en la actualidad en los calabozos de la Dirección de Investigación Criminal (Dijín) en Bogotá bajo estrictas medidas de seguridad.

Actualmente, lo que sigue es que una vez la Corte recibe la solicitud de extradición, que se tramita por medio de la Cancillería, hace un aval y un estudio jurídico de si existe tratado y conceptúa. Tampoco es posible como escenario que la Corte suspenda la extradición pues no tiene la facultad para hacerlo, siendo esa solo una competencia del Presidente de la República.

La polémica en la Comisión de la Verdad

Recientemente se conoció la denuncia hecha por la Comisión de la Verdad sobre el robo de las grabadoras digitales que se usaron en entrevistas a Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel, así como un computador que contenía sus declaraciones.

Los dispositivos fueron hurtados el pasado 18 de febrero por personas sin identificar que ingresaron a la vivienda del investigador de la Comisión, Eduardo Andrés Celis Rodríguez, quien acompaña al comisionado Alejandro Valencia Villa en la entrevista con alias Otoniel.

Respecto al sonado caso, el ministro de Defensa, Diego Molano, aseguró que alias Otoniel tenía un plan de fuga durante su comparecencia ante la Comisión de la Verdad. En consecuencia, se suspendió la diligencia y se limitaron las acciones judiciales que se venían adelantando.