Una movida política llamó la atención en la Cámara de Representantes en las últimas horas. En una votación de 88 votos a favor y 22 en contra, la plenaria respaldó la decisión de que Álvaro Hernán Prada reemplace a Ricardo Ferro –ambos del Centro Democrático– en la Comisión de Acusaciones.
El problema radicó en que surgieron varios cuestionamientos porque Prada actualmente es investigado por la Corte Suprema de Justicia con relación al caso del expresidente Álvaro Uribe por soborno a testigos y fraude procesal, mientras que la Comisión de Acusaciones es la que se encarga de investigar a los aforados del país, es decir, a los magistrados de la Corte.
Al darse el nombramiento, varios congresistas, especialmente de la oposición, cuestionaron el hecho por las evidentes contradicciones que se pueden presentar, y pidieron al Centro Democrático que postulara a otro candidato que no fuera Prada.
Por su parte, Álvaro Hernán Prada se defendió diciendo que no ha sido juzgado aún y que todos tienen derecho a la presunción de inocencia. Pero a este argumento le salieron otros cuestionamientos, que argumentan que más allá del tema jurídico en el que Prada tiene derecho a ser parte de esta comisión, el mensaje que se manda desde el Legislativo no es el mejor.
El representante Mauricio Toro, de la Alianza Verde, y quien también conforma la Comisión de Acusaciones, cuestionó el hecho. Comentó que no es un acto ético y que no se trata de un cuestionamiento personal hacia Prada, sino a los hechos que evidentemente lo inhabilitan.
“Se los digo con todo el cariño, con todo el respeto al representante Álvaro Hernán Prada, esto no se ve bien para la Cámara de Representantes ni para la Comisión de Acusaciones. Que el doctor Álvaro Hernán tiene el derecho de pertenecer a la Comisión, eso no está en duda. Que el partido Centro Democrático tiene ese puesto dentro de la comisión, eso no está en duda", comentó Toro.
Pero dijo que la duda radica en que hay más personas capacitadas en el Centro Democrático que podrían cumplir esa función sin los impedimentos que tiene Prada. Para Toro es clave el proceso del que se está hablando, es decir, el del expresidente contra Iván Cepeda, ya que según él no es cualquier proceso, sino de los más importantes de los últimos meses.
“No es un proceso cualquiera que se está tratando, es uno de los procesos de escándalos políticos más grandes y graves que ha tenido que cursar Colombia frente a la Corte Suprema de Justicia”, dijo el congresista de la Alianza Verde.
El cuestionamiento ha sido respaldado por otros sectores. Hace unos días, cuando esta movida ya estaba sonando, el excandidato y jefe negociador del Acuerdo de Paz con las FARC, Humberto de la Calle, respaldó las dudas de Toro.
“Mauricio Toro tiene razón. Elegir a Álvaro Hernán Prada, investigado por la Corte, en la Comisión de Acusaciones, que a su vez investiga a los magistrados, es un acto que desafía deberes elementales de ética. Una postulación del CD inicua e impúdica”, dijo De la Calle.
Lo cierto es que la decisión ya fue tomada y respaldada por la Cámara de Representantes. Actualmente el Gobierno y los partidos tradicionales cuentan con las mayorías y por eso era predecible que un cambio de este tipo, por más cuestionamientos que tuviera, no se podía frenar.
Para muchos, el nombramiento no será muy útil porque eventualmente Prada se tendrá que declarar impedido para varias investigaciones que involucren a los magistrados de la Corte Suprema. Sin embargo, pareciera ser más una jugada política del Centro Democrático con el fin de enviar un mensaje a la Corte sobre la que el expresidente y los líderes de la colectividad han dicho que está politizada luego de que dictaran la medida de aseguramiento contra Uribe.