María Fernanda Cabal sí está molesta por la decisión del expresidente Álvaro Uribe de poner a Miguel Uribe Turbay como cabeza de lista para el Senado, por el Centro Democrático.
La senadora consideraba que debía ser ella y que se trataba de un derecho adquirido por haber pasado ocho años en el Senado representando a su partido en esa corporación, dando tantas batallas en su defensa, y por haber quedado de segunda en la contienda interna por la candidatura presidencial.
Ella no esconde su “inconformidad” con la decisión de Uribe y este domingo, en diálogo con SEMANA, dijo que el mensaje enviado por el exmandatario, con esta decisión, es “confuso e incomprensible”.
Cabal considera que la competencia para definir la cabeza de la lista de Senado la tiene el Directorio Nacional y no Uribe, pero no piensa “hacer nada diferente a lo de siempre: buscar un buen número en la lista y hacer la mejor campaña”.
Piensa que la mejor estrategia del Centro Democrático para enfrentar con éxito este momento, “afectado por ser identificado como partido de Gobierno”, es “recoger de nuevo las banderas de Uribe para renovar y ampliar las bases”, pero que la decisión de Uribe no ayuda mucho.
La confirmación de Uribe, esta mañana, de poner a Miguel Uribe en el primer lugar de la lista para Senado, es el segundo golpe para Cabal en cuestión de semanas. El primero había sido no quedar como candidata presidencial, hecho que ella creía que ocurriría.
De hecho ella no quedó conforme con los resultados de la encuesta y no corrió a apoyar la candidatura del ganador, Óscar Iván Zuluaga, como se esperaba en el uribismo que lo hiciera.
Cabal será candidata al Senado, posiblemente tendrá el número cien, pero su postura de confrontar con Uribe deja fisuras en el uribismo.
Miguel Uribe regresará esta semana al país para iniciar su campaña y comandar la lista de candidatos al Senado.
El pupilo de Uribe para encabezar la lista de Senado le dijo a SEMANA que no se considera más que María Fernanda Cabal, pero sí diferente. Su eje de campaña será lograr la unidad del uribismo en el Congreso, contener el avance del populismo y enfrentar a Gustavo Petro.
Aunque la política permite ver cosas inesperadas, no es fácil pensar que Cabal comparta espacio con Miguel Uribe, a quien considera una persona que no representa las ideas del uribismo.
El nuevo reto del uribismo es muy difícil, además, si piensa que puede mantener el poder de la Presidencia de la República y ciertas mayorías en el Congreso.