Consternación y dolor vive la familia del adolescente de 14 años, Breiner David Cucuñame López, considerado un guardián ambientalista del territorio Kiwe Thegna, y que fue asesinado en un ataque perpetrado por miembros de las FARC al resguardo indígena Las Delicias, en Cauca, el pasado 14 de enero.

Aparte de sufrir por la pérdida de su ser querido, la familia de Cucumañe debió salir forzadamente de su comunidad debido a que recibieron serias amenazas. Así lo confirmó Juan Manuel Camayo, vocero de derechos humanos de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), indicó el portal de noticias Infobae.

“La familia debió salir por amenazas en contra de su vida, el nivel de riesgo y de vulnerabilidad en el que se encuentra, razón por la cual tuvieron que dejar el territorio para salvaguardar su integridad”, dijo Camayo.

Breiner Cucumaña se encontraba realizando labores de resguardo indígena cuando comenzó el ataque a la comunidad. | Foto: Consejo Regional Indígena Cauca

El vocero indígena también alertó que las amenazas a los indígenas son constantes por la resistencia que han tenido frente a los actores del conflicto armado, principalmente por parte de las disidencias de las FARC, quienes los atacaron el pasado fin de semana y dejaron como saldo dos indígenas muertos, entre ellos el joven ambientalista.

La autoridad de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca explicó que la guardia indígena en Las Delicias ha venido realizando un ejercicio de control territorial que consiste en la no presencia de actores armados, y se oponen a la siembra de cultivos de uso ilícito. “Esto ha provocado que las autoridades ancestrales sean consideradas como objetivos militares por los grupos armados”, denunció Camayo.

El Consejo Regional Indígena del Cauca confirmó que el ataque fue perpetrado por la columna Jaime Martínez de las disidencias de las FARC ese día. Una comisión verificó esta incursión y alertaron a los miembros de la guardia indígena que los hombres de las disidencias iban fuertemente armados.

“Nos indican coger un desecho. Diez minutos más adelante nos agarran a bala. Nos tocó tirarnos por un peñasco, rodamos. De ahí en adelante se escuchó el estruendo de una bomba. Después nos comunican en la radio de la guardia que había dos heridos. Salimos a la carretera, pasó el carro de la guardia y nos alzó. Más abajo nos encontramos con los compañeros que estaban heridos”, indicó uno de los testigos.

Sumado a esto, la comunidad anotó que todo esto se debe a una puja de los grupos armados por apoderarse de rutas para mover narcotráfico a otras zonas. Esta situación ha venido aumentando en Colombia desde 2021 por el surgimiento de nuevos actores armados, la denunciada ausencia estatal y la exacerbación de la violencia por disputas de grupos e intimidación a comunidades mayormente de zonas rurales.

El día del ataque, el joven ambientalista se encontraba atento a sus funciones de resguardo. Realizaba labores de control territorial, junto con otros miembros adultos de la Guardia Indígena, cuando inesperadamente fueron atacados por los guerrilleros.

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Colombia, condenó este ataque armado en Cauca, en el que fallecieron dos personas, y donde también resultó herido el líder Luis Fabián Camayo Guetio.

La ONU reiteró el llamado al respeto a la vida de todas las personas y a garantizar la seguridad de las autoridades indígenas y de sus comunidades en las diferentes regiones de Colombia.

“Llamamos a tomar todas las medidas para prevenir futuras violaciones de Derechos Humanos en la zona del norte del Cauca, a través del diálogo y la concertación de acciones de protección y prevención”, señaló la organización en su cuenta Twitter.