Cada vez son más frecuentes los casos en los que, tanto mujeres como hombres, son contactados a través de redes sociales por individuos que se hacen ganar la confianza de sus víctimas para finalmente robarlos y, en algunos de los casos, hasta asesinarlas tras suministrarles sustancias que las dejan en estado de indefensión.
En Bogotá se presentó recientemente un caso, según denunció la Fiscalía General de la Nación. La protagonista: una mujer de nacionalidad venezolana identificada como Glerysmar Anais Castro, quien, de acuerdo con el ente acusador, sería la responsable de cometer varios hurtos en la ciudad, en los que hombres perdieron la consciencia por el consumo de sustancias extrañas y les fueron robadas sus pertenencias.
La investigación de la Fiscalía estableció que esta mujer, al parecer, contactaba a sus víctimas por redes sociales, las seducía e invitaba a su vivienda.
Aseguran que una vez en el inmueble de la mujer, ella les brindaba a una bebida alcohólica que tenía una mezcla tóxica y las doblegaba para quitarles los objetos de valor.
Entre las víctimas de Glerysmar Anais Castro está un hombre de nacionalidad estadounidense, a quien, según la Fiscalía, le robó hasta su perro. Fue la misma Embajada de Estados Unidos en Colombia la que puso en conocimiento del ente investigador lo ocurrido.
“La Embajada de Estados en Colombia puso en conocimiento de la Fiscalía que uno de sus nacionales había sido afectado. A esta persona, además de ser puesta en estado de indefensión, le robaron el animal de compañía”, informó la Fiscalía.
Una vez llevada a cabo la investigación y tras contar con la evidencia, en un operativo realizado de manera conjunta entre Fiscalía y la Policía Metropolitana de Bogotá, capturaron a Glerysmar Anais Castro en su vivienda.
A la mujer le hallaron 25 relojes de diferentes marcas, cinco celulares, tres discos duros, un parlante portátil y dinero en efectivo y, por fortuna, recuperaron el perro del ciudadano norteamericano.
A Glerysmar Anais Castro la Fiscalía le imputó el delito de hurto calificado y agravado, y un juez de control de garantías la envió a prisión.
Aunque el cargo imputado por la Fiscalía no fue aceptado por la mujer, esta finalmente deberá cumplir medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario, tal como lo ordenó el juez del caso.
Joven que desapareció en Envigado fue encontrada en Cali con efectos de escopolamina
En otros hechos, sobre la tarde del pasado miércoles, 1 de marzo, se hizo viral una publicación en las redes sociales, en la que se advertía la desaparición de una joven mujer de 28 años, identificada como Juliana Obando Henao, en el municipio de Envigado (Antioquia).
Inmediatamente, su familia inició la exhaustiva búsqueda, sin embargo, horas después pudieron conocer que, al parecer, habría sido víctima de secuestro en el sector Guanteros a plena luz del día, cuando apenas se dirigía a su lugar de trabajo, un consultorio odontológico.
Para el alivio de sus allegados, recibieron la noticia que Juliana había aparecido con vida en una clínica de la ciudad de Cali (Valle del Cauca).
“Juliana ya apareció, nos llamaron de un hospital en Cali. Se encuentra algo hinchada y con falencias de salud, le van a hacer exámenes médicos. La doctora del hospital nos contactó y manifestó la presencia de Juliana en dicho hospital”, reveló un familiar.
Mientras que su padre, Hernán Obando, dijo que fue él quien recibió la llamada. “La encontraron bajo los efectos de un sedante o narcótico, qué sé yo. Las autoridades o la clínica sabrá bajo qué efectos apareció, pero apareció en Cali, en otro departamento de este país. Como es posible que eso pase”, dijo Obando, quien a su vez está exigiendo respuestas de lo sucedido.
Entretanto, los allegados a la víctima indicaron que el caso se encuentra en investigación.
De otro lado, en la ciudad de Cali se puso en funcionamiento una nueva estrategia para enfrentar las denuncias de violencias basadas en género contra mujeres y miembros de la comunidad LGBTIQ+.
Se trata de la Patrulla Púrpura, una iniciativa liderada por la Policía Metropolitana de Cali, la Alcaldía y la Fiscalía General de la Nación.
Funcionará como un consultorio para hacerle frente a la violencia basada en género, desde la protección de los derechos y la respuesta oportuna a los llamados de las víctimas.