El 7 de julio de 2021 se produjo el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse, en su residencia de Puerto Príncipe, en un hecho por el cual se encuentran detenidos 17 colombianos.
Al cumplirse dos años del magnicidio, familiares de los militares acusados de asesinato hicieron un llamado para que se les permita un juicio justo y se les deje en libertad lo más pronto posible.
María Dulcinea Sierra, madre del sargento viceprimero (r) Ángel Mario Yarce, le envió un mensaje al presidente Gustavo Petro en el que le pidió su intervención.
“Le pido con el corazón en la mano, por favor, señor presidente, ayúdenos a que ellos salgan y vengan a la casa, son inocentes. Señor presidente, yo le presté a mi hijo a Colombia para que le sirviera y me lo quitaron.
Portando una foto de su hijo, añadió: “Me hace hace el favor, vuelva y me lo manda a su país, a Colombia, a la tierra de él. Tráigamelo, señor presidente”, señaló en un mensaje que fue publicado por Red más Noticias.
Pero no solo fue la madre del uniformado, quien sirvió más de 21 años al Ejército, la que se refirió a la situación de su hijo, también lo hizo la esposa del sargento viceprimero (r) Ángel Mario Yarce, Carolina Bonilla, quien dijo que desde hace varios meses no tienen noticias de él.
Señaló que guarda como un tesoro la última carta que recibió y en la que la saludó a ella y a su hijo: “Amor, la amo con todo mi corazón. Hijo, tú eres lo más importante para mí. Dios los bendiga, los amo. Dios con nosotros”.
Le dijo a ese medio que la corta misiva le fue entregada gracias a la mediación de la Cruz Roja Internacional. Dijo que para este jueves y viernes, cuando se cumpla el segundo año de la detención de su esposo, se realizará un plantón para pedir al Gobierno una intervención urgente en este caso.
“La Cruz Roja Internacional nos hizo el favor de verificar su estado. Y a través de ellos me llegó una carta y es lo único que puedo saber de él. No tenemos más noticias de ellos”, señaló.
Igualmente, le dijo a ese medio que en agosto de 2021 pudo visitarlo en la cárcel, pero que desde entonces no ha podido volver a verlo. Indicó que en esa oportunidad se le notaron varias heridas, mientras que las condiciones eran precarias en el sitio de reclusión.
“Cuando lo visité me dejó claro que es inocente, y que no cometieron ese crimen que les señalan. También me pidió que lo perdonara porque lo único que quería era buscar un mejor porvenir para su familia”, relató.
Recordó que su esposo fue destacado por sus servicios en el Ejército: “Tiene más de 100 felicitaciones y su máximo nivel de conducta. No tuvo ni un solo llamado de atención. Un hombre íntegro, buen papá, excelente hijo”.
Igualmente, destacó que el hijo de los dos, que hoy tiene 11 años, no pierde la esperanza de ver pronto a su padre.
“Desde hace dos años no ve a su papá, y eso ha sido muy difícil porque uno trata de entender como esposa las circunstancias que estamos viviendo, pero no se le puede explicar a una persona de 9 años que su papá está detenido siendo inocente, de un magnicidio tan grande”.
Finalmente, recordó que en julio de 2021 mantuvo con su esposo una larga charla, sin contratiempos, pero que pasadas las 11 de la noche no les permitieron seguir hablando.
“Hablamos normal, sé que él no tenía idea de todo lo que iba a pasar”, señaló, tras indicar que la madre del sargento se comunica todos los días con ella preguntando por su hijo.
“Mija, qué ha pasado, qué ha dicho. Es una agonía escucharla a ella por teléfono pidiéndome a mí que le traiga a su hijo, uno tratando de luchar con un gobierno para que nos ayude a traerlo”, puntualizó.