La movilidad en Bogotá es una verdadera odisea. Los interminables trancones se volvieron el pan de cada día, haciendo imposible el tránsito en la capital y como si fuera poco, TransMilenio, que es una de las pocas soluciones viables que hay en la ciudad, está ad portas de un inminente colapso financiero.
Para el concejal Martín Rivera Alzate, del Partido Alianza Verde, Bogotá requiere soluciones audaces que nos permitan encontrar alternativas: “La crisis de movilidad es cada vez más grande y si no pensamos en ideas audaces y que transformen la realidad, seguiremos usando pañitos de agua tibia para resolver los problemas cotidianos más urgentes.”
De acuerdo con Rivera, hay varias razones para hablar de una inminente crisis financiera en el sistema de transporte público: “El costo de la operación del sistema no se paga únicamente con el costo del pasaje. Con otros ingresos del presupuesto de la ciudad tuvimos que respaldar esa diferencia”, dijo.
Así mismo, señaló: “El costo de transporte para los hogares más vulnerables puede representar hasta el 30 % de sus ingresos o más, teniendo en cuenta los costos adicionales de los viajes en transporte informal”.
Lo anterior, según el concejal de la Alianza Verde, coincide con un aumento de la evasión en el sistema TransMilenio. Actualmente, uno de cada tres usuarios no paga su pasaje en el componente troncal y cada semana se pueden colar hasta dos millones de personas. Adicionalmente, el negocio de venta ilegal de pasajes es cada vez más rentable mientras la ciudad tiene pérdidas millonarias.
En ese sentido, el cabildante propone que Bogotá logre una tarifa cero para el sistema de transporte de la ciudad. Es decir, que nadie tenga que pagar para movilizarse en transporte público.
Rivera explicó que en 2021, los costos totales del sistema TransMilenio (Incluyendo SITP, Cable y Alimentadores) fueron de 3,7 billones de pesos. “Con los pasajes pagados recaudamos solo 1,4 billones de pesos y sumando otras fuentes llegamos a los 1,5 billones de pesos. ¿Con qué cubrimos la diferencia de los costos totales? Con el Fondo de Estabilización Tarifaria. Este Fondo ya superó los dos billones de pesos”, dijo.
Según el Concejal, llegar a tarifa cero costaría 1,7 billones de pesos adicionales. Señaló que estos recursos podrían venir del Presupuesto del Gobierno Nacional. “Tenemos que aprovechar la oportunidad histórica de tener un presidente que, cuando fue alcalde de la capital, entendió la importancia de rebajar el costo del pasaje en TransMilenio y ahora puede destinar más recursos del Gobierno nacional hacia Bogotá para que logremos este propósito.”
Para Rivera Alzate, si los usuarios del transporte público no tuvieran que pagar un pasaje en Bogotá y se encontraran alternativas audaces de financiamiento (captura de valor, publicidad, certificados de edificabilidad, etc.), habría importantes beneficios que promuevan:
- Equidad social: garantizando el derecho a la movilidad de todas las personas; equidad, inclusión y acceso a la ciudad para los hogares de menores ingresos; un ahorro importante para las mujeres, quienes hacen más viajes; dejar de perseguir colados y usar esos esfuerzos para mejorar la seguridad de la ciudad.
- Desarrollo económico: aumentando la capacidad de consumo de los hogares que más usan el sistema para dinamizar la economía en diferentes sectores.
- Movilidad sostenible: desincentivando la compra de motos y carros, promoviendo el transporte público como una alternativa a modos particulares, reduciendo trancones, mejorando la calidad del aire y disminuyendo la accidentalidad vial.
Rivera Alzate concluyó advirtiendo que “Bogotá está preparada para discutir sobre tarifa cero y ser un referente mundial de inclusión y accesibilidad a través de su transporte público. Empecemos la conversación. ¿Por qué no hacer de Bogotá la primera gran ciudad en el mundo en lograrlo?”, subrayó.