La situación que se vive en Guyana es complicada. El país vecino de Venezuela vive una ofensiva por parte del presidente Nicolás Maduro, que quiere a las malas montarse en ese rico territorio. Sin embargo, Guyana no está sola.
En entrevista con SEMANA, su presidente, Irfaan Ali, habló de la buena relación que tiene su país con los Estados Unidos. “Estamos en comunicación permanente con diferentes agencias del Gobierno de Estados Unidos, el Departamento de Estado, de Defensa, la Casa Blanca. Nuestro mensaje es muy claro: Estados Unidos tiene una responsabilidad importantísima para asegurar que esta región permanezca en paz y la responsabilidad de asegurar que ninguna “anexión” suceda en esta región”, dijo.
El líder de los guyaneses le hizo, en entrevista con Vicky Dávila, una solicitud muy especial al presidente Joe Biden. “Pedimos que actúe en contra de la administración de Maduro que está en total violación del derecho internacional, y en defensa de la estabilidad de la región”, dijo.
Ante la pregunta de si cree que la Casa Blanca está dispuesta a defender militarmente a Guyana, su respuesta fue: “Como dije, hemos estado mejorando y robusteciendo nuestras operaciones militares con Estados Unidos. Hemos tenido una colaboración, en los últimos dos años, con programas militares que continúan. La alianza sigue siendo más fuerte cada día y estamos en discusiones con Estados Unidos y otros países para tomar las medidas de precaución que aseguren la estabilidad y la paz de la región, y la integridad territorial y la soberanía de Guyana”.
Ali fue enfático en señalar que Guyana no está sola. “Claro que no. No estamos solos. Somos un Ejército que siempre promueve, trabaja y construye la paz. Tenemos nuestros amigos y aliados, por eso fuimos al Consejo de Seguridad de la ONU. Tenemos muchos países que ya se han ido expresando y una mayoría abrumadora de la comunidad internacional está con Guyana”, agregó.
Justo el jueves pasado, Estados Unidos anunció ejercicios aéreos militares en Guyana entre crecientes tensiones entre Georgetown y Caracas por un antiguo diferendo territorial y el Consejo de Seguridad de la ONU anunció que debatirá el tema de manera “urgente”. La embajada estadounidense en Guyana informó que “en colaboración con la Fuerza de Defensa de Guyana, el Comando Sur de los Estados Unidos llevará a cabo operaciones de vuelo dentro de Guyana el 7 de diciembre”, lo que Venezuela calificó de “infeliz provocación”.
“Este ejercicio se basa en compromisos y operaciones de rutina para mejorar la asociación de seguridad entre los Estados Unidos y Guyana y fortalecer cooperación regional”, apuntó la embajada en un comunicado. El ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, rechazó estos ejercicios.
“Esta infeliz provocación de Estados Unidos a favor de los pretorianos de la ExxonMobil en Guyana es otro paso en la dirección incorrecta. Advertimos que no nos desviarán de nuestras futuras acciones por la recuperación del Esequibo ¡No se equivoquen! ¡Viva Venezuela!”, escribió Padrino en la red social X.
El miércoles, Caracas acusó al presidente de Guyana, Irfaan Ali, de dar “luz verde” a bases militares estadounidenses en el Esequibo. “De manera irresponsable ha dado luz verde a la presencia del Comando Sur de los Estados Unidos en el territorio de la Guayana Esequiba”, indicó un comunicado de la Cancillería. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, habló el miércoles con Ali para “reafirmar el apoyo inquebrantable de Estados Unidos a la soberanía de Guyana”, señaló el Departamento de Estado.
Blinken pidió “una solución pacífica” y el respeto de las partes “al laudo arbitral de 1899, que determina la frontera terrestre entre Venezuela y Guyana”, a menos que “lleguen a un nuevo acuerdo o un órgano legal competente decida lo contrario”. “Lo que no queremos es una guerra en América del Sur, no necesitamos un conflicto”, dijo el jueves el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo país también reforzó su presencia militar en sus fronteras con Guyana y Venezuela.
El presidente guyanés le dijo a SEMANA que ellos esperan que las cosas se solucionen por una vía pacifica. “Estamos con la esperanza de que el consenso prevalecerá y que Maduro y Venezuela no van a actuar de una manera aventurera y muy irresponsable. Sin embargo, basado en todo lo que el presidente Maduro está diciendo y haciendo, y con base en lo que ha anunciado, estamos muy preocupados al punto de que hemos tramitado este tema oficialmente ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Hemos informado a todos nuestros aliados y hemos empezado a tener conversaciones de defensa con ellos para asegurar que Guyana está en un estado de alistamiento por esta tremenda amenaza de parte de Venezuela”.
Hace cuatro días el gobierno venezolano celebró un referendo para obtener apoyo en su reclamo sobre el Esequibo, territorio rico en petróleo equivalente a dos tercios de la superficie de Guyana y administrado por este país que ambos vecinos se disputan hace más de un siglo.
Tras la aprobación del referendo por un 95% de los votantes que participaron, según cifras oficiales, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, propuso una ley para crear una provincia venezolana en la zona disputada y ordenó a la petrolera estatal PDVSA otorgar licencias para extraer crudo allí.
El hallazgo en 2015 de importantes yacimientos de petróleo en aguas en disputa por parte de la petrolera estadounidense ExxonMobil ha agudizado la controversia.