Aunque el Gobierno Petro insistió durante varios meses sostener la mesa de diálogos con la guerrilla del ELN, dicha negociación está en el congelador y las partes han ido perdiendo contacto poco a poco.

A pesar de que esa organización guerrillera tiene una delegación de paz, Antonio García, máximo comandante de ese grupo criminal, resultó ser uno de los más críticos de Gustavo Petro y de la política de ‘paz total’, y casi que a diario lanza duras puyas al Gobierno por la manera en que abrió frentes de diálogo con diferentes grupos armados.

Como el presidente Gustavo Petro y Salvatore Mancuso, exjefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), protagonizaron un controversial acto el pasado 3 de octubre. Luego de que intercambiaron sus sombreros en medio del evento en Montería, Córdoba, el líder guerrillero se pronunció en sus redes sociales sobre el asunto.

García, quien aprovecha cualquier oportunidad para lanzar dardos contra Petro, escribió en sus redes sociales un mensaje que demuestra las diferencias que tiene con el Gobierno Nacional.

“Qué folclórica se está volviendo la ‘paz total’. Ahora intercambiando sombreros ‘vueltiados’ con Mancuso. El presidente se está ‘vueltiando’ con nuevos amigos venidos de los paracos y los traquetos, que anuncia vendrán como ‘gestores’, claro que también ‘vueltiados’”, dijo el comandante guerrillero.

El mensaje de García ha sido ampliamente comentado y se suma a la lista de críticos que ha tenido Petro por ese encuentro con el exparamilitar en el departamento de Córdoba.

Pero García no ha sido el único que ha lanzado críticas, ya que mediante su cuenta personal de X (Twitter), la actual cónsul general de Colombia en Santiago de Chile, María Antonia Pardo, no dejó pasar por alto este hecho y cuestionó públicamente al centro político colombiano, ya que muchos integrantes de este criticaron al mandatario por este hecho.

“Yo pensaba que el centro político, sector con el que me siento identificada y del que creo hago parte, estaba a favor de la paz de manera irrestricta. Del Sí. De llegar a acuerdos entre enemigos por el bien de la Patria. Pero pasan estas cosas, como el tema del intercambio de sombreros, y me confundo”, señaló inicialmente.

Luego, concluyó: “¿Al fin qué, paz sí, pero no así? ¿Cómo la derecha? Pónganse serios, por favor. Paz sí, paz siempre, por la paz todo. Con una condición, eso sí: justicia, verdad y reparación”.

Al expresidente Álvaro Uribe no le cayó bien que el presidente Gustavo Petro busque desempolvar el proceso de Justicia y Paz que se adelantó durante su gobierno y que, en esta oportunidad, según el hoy primer mandatario, buscaría la verdad y el esclarecimiento de varios hechos del conflicto.

“La autoridad y las convicciones no pueden ceder ni ante la seducción ni ante la amenaza. La paz no es un juego ni un teatro de compadres”, escribió el exmandatario en sus redes sociales.

Y siguió: “Colombia ha tenido procesos de claudicación ante el terrorismo como el firmado con las Farc. Para nada sirvió. Nuestra ley de Justicia y Paz desmovilizó 35 mil paramilitares y 18 mil guerrilleros. Se les cumplió a quienes cumplieron, se extraditó a quienes siguieron violando la ley”.

Y es que Petro volvió a mirar con espejo retrovisor y lanzó pullas a Justicia y Paz. De paso, no descartó el esclarecimiento del paramilitarismo en Colombia.

“Voy a hacer un listado. Por ahora pienso en Jiménez, Tovas y Mancuso. El último parece que ya resolvió su situación desde el punto de vista de conflicto de competencias, pero puede operar ya como gestor de paz”, anunció Petro.

Además, en plaza pública, el hoy presidente le propuso a Mancuso “instalar la mesa para finiquitar el proceso de paz que inició Álvaro Uribe Vélez con ustedes, esta vez sin traición, esta vez sin miedo a la verdad que, creo, existía en esa época. Les tenían pavor a las verdades. Esta vez, para que el benefactor de ese proceso sea el pueblo humilde, para que pueda ser resarcido, haya indemnización. Es la antesala de perdón”.