Momentos de pánico se vivieron este jueves 26 de octubre en el norte de Bogotá, luego de que se registrara un ataque armado contra una camioneta en la calle 183 con 9, donde fallecieron dos personas. El hecho ocurrió alrededor de las 7:30 a. m.
La Policía Metropolitana indicó que las primeras hipótesis hablan de un caso de sicariato, recalcando que las dos víctimas fatales fallecieron en el lugar de los hechos. Se trata del abogado Carlos Ernesto Gaviria y su pequeño hijo, el cual tenía tan solo 14 años.
Igualmente, con el pasar de las horas, se han revelado nuevos detalles de este caso. Se conoció, por ejemplo, que el hombre se dirigía al colegio del menor cuando fue interceptado por dos sujetos en una motocicleta, los cuales le dispararon, al menos, en siete oportunidades.
Las autoridades, pese a que en un principio informaron que el joven había sufrido un infarto, confirmaron que este falleció debido a que uno de los proyectiles, que inicialmente impactó en su padre, le perforó el tórax, provocándole la muerte instantánea.
“La verdad, en estos momentos se acaba de realizar la inspección técnica por parte de nuestro CTI, que indicó que efectivamente uno de los impactos, que fue prácticamente al padre, también lo afectó y le quitó la vida de esta manera”, precisó el coronel Javier Gallego, comandante de seguridad ciudadana de la Policía Metropolitana de Bogotá.
¿Qué se sabe de este caso?
La Policía indicó que Carlos Ernesto no tenía antecedentes penales ni deudas pendientes con la justicia. Sin embargo, había estado involucrado en un proceso legal previo, ya que fue demandado por un tercero.
Según se conoció, este proceso en su contra se debió al incumplimiento de un laudo arbitral relacionado con la compraventa de unas acciones por un valor superior a los 159 millones de pesos. Esta querella legal se llevó a cabo de manera irregular, lo que llevó a Gaviria a presentar una denuncia penal contra la jueza que lo había embargado.
El hombre, adicionalmente, instauró una demanda contra la Sala Civil del Tribunal Superior de Distrito Judicial de Bogotá en enero de este año. Su nombre también aparece en comunicaciones relacionadas con un proceso de conciliación por una denuncia de convivencia, el cual fue cerrado por el inspector 11 de Policía en diciembre de 2022.
Las autoridades avanzan en la investigación de este nuevo ataque de sicariato en la capital colombiana, que actualmente enfrenta una dolorosa ola de violencia. La comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, Sandra Hernández, ordenó la implementación de un plan candado en toda la ciudad con el fin de ubicar a los dos responsables del doble sicariato.
Finalmente, se ha autorizado la entrega de una recompensa de hasta cincuenta millones de pesos para aquella persona que proporcione información valiosa que conduzca al arresto de los presuntos autores materiales de este crimen que conmocionó a la ciudadanía.