Ya lo había anunciado el vocero del grupo promotor de la iniciativa de la senadora liberal Viviane Morales, que pretendía definir la familia “ideal” para adoptar menores. El pasado 11 de mayo, cuando la Comisión Primera de la Cámara de Representantes tomó la decisión de hundir el referendo con 20 votos contra 12, Carlos Alonso Lucio anunció que usaría todas las herramientas para apelar esa decisión, entre ellas un gran plantón la semana siguiente a esa votación. Movilización que no se realizó. La apelación fue radicada este martes, 30 de mayo, en la Presidencia de la Cámara. Un grupo de nueve organizaciones civiles le escribieron una carta a los promotores del referendo Por Papá y Mamá para que apelen ante la corporación la decisión de la Comisión “y se le permita al pueblo de Colombia definir esta discusión cultural por vías democráticas”. Pero hace unos días la senadora Morales había tomado la decisión de no insistir con la apelación, no sin antes culpar al gobierno de imponer la llamada “ideología de género”, que terminó por vencer su referendo. “Este Gobierno, ejerciendo una presión abusiva, logró imponer su ideología de género, torciendo la voluntad de algunos representantes a la Cámara para hundir esta iniciativa popular firmada por 2 millones de colombianos”. Es por eso que esas organizaciones civiles, acogiendo el llamado que en días pasados había hecho la Conferencia Episcopal, de “respeto y defensa de la vida humana” desde una familia “fundada en el matrimonio entre hombre y mujer”, le solicitaron la firma a cinco representantes a la Cámara que hacen parte de esa comisión. Puede leer: El referendo de Viviane Morales no llegó a las urnas Edward Rodríguez, María Fernanda Cabal, Álvaro Hernán Prada, Santiago Valencia, del Centro Democrático, y Silvio Carrasquilla, del Partido Liberal, (el mismo que citó pasajes de la Biblia el día del debate en la Comisión Primera para justificar su posición a favor de la iniciativa) firmaron para hacer uso de la apelación y así intentar revivir el referendo. El artículo 166 de la Ley 5ta de 1992 avala la iniciativa. Este dice que cualquier miembro de esa Comisión o el autor del mismo podrán apelar la decisión.“Negado un proyecto en su totalidad o archivado indefinidamente, cualquier miembro de la Comisión o el autor del mismo, el Gobierno o el vocero de los proponentes en los casos de iniciativa popular, podrán apelar la decisión ante la Plenaria de la respectiva cámara”.Le puede interesar: Viviane Morales se despacha contra Santos También lo dice el artículo 159 de la Constitución Política: “El proyecto de ley que hubiere sido negado en primer debate podrá ser considerado por la respectiva cámara a solicitud de su autor, de un miembro de ella, del Gobierno o del vocero de los proponentes en los casos de iniciativa popular”. ¿Cuál sería el trámite que viene? En ese orden de ideas, el presidente de la Cámara de Representantes, Miguel Ángel Pinto, quien rindió ponencia positiva el día de la discusión, definirá los miembros de la comisión accidental que le tendrán que rendir un informe a la plenaria de la Cámara de Representantes. Es ahí cuando los 166 representantes debatirán para definir si deciden revivir o no el referendo. Si la decisión de los legisladores es a favor de la iniciativa, esta entrará, por orden de Pinto, a otra comisión de la Cámara diferente en la que se hundió y respetará los debates que ya había cursado. Es decir, entrará a tercer debate y deberá completar los cuatro que exige la ley para pasar a revisión de la Corte Constitucional y luego a la consulta por parte de los colombianos. Si por el contrario la plenaria decide votar en contra, el referendo es archivado definitivamente. Este martes Carlos Alonso Lucio anunció que él y su esposa apoyarán los debates que se den en la respectiva comisión, si llega a pasar de la plenaria. Lo hizo por medio de otra carta que radicó en la Presidencia de la Cámara y en la que expuso que la Comisión debió respetar la voluntad de los más de 2 millones 300 mil personas que firmaron. Además, aseguró que luego del 11 de mayo creció el apoyo a la iniciativa por parte de diferentes sectores sociales y que luego de que la Conferencia Episcopal y de los líderes laicos tomaron la iniciativa de impulsar la apelación, se ve en la "obligación moral de adelantar esta lucha hasta sus últimas consecuencias en defensa de los niños y la familia". Es por eso que agotará todos los recursos que la ley otorga. De esta manera, el referendo de Viviane Morales vuelve a acaparar la atención del Congreso y los titulares de prensa.