Los presidentes de Chile, Colombia, México, Perú y Costa Rica se encuentran en Cartagena para participar este lunes en la VIII Cumbre de la Alianza del Pacífico, mecanismo considerado "piedra angular de la integración" regional. La primera actividad de los mandatarios es una cena ofrecida hoy en su honor por el presidente anfitrión, el colombiano Juan Manuel Santos, en la Casa de Huéspedes, residencia de verano del Gobierno en esta ciudad del Caribe colombiano. El último en llegar fue el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, quien invitó a trabajar para "asegurar y lograr una mayor integración de los países" de la Alianza del Pacífico, mecanismo "que ha generado una gran expectativa de la región hermana de América Latina y de otros países de diferentes latitudes", dijo. La importancia de esta cumbre radica en la firma del Protocolo Adicional al Acuerdo Marco de la Alianza que será firmado el lunes por Santos, Peña Nieto y sus homólogos de Chile, Sebastián Piñera, y de Perú, Ollanta Humala, para eliminar los aranceles al 92 % de los bienes y servicios que se comercian entre los cuatro países. "Venimos como un socio hermano a finiquitar los acuerdos comerciales que expresan la voluntad política de cuatro pueblos hermanos, México, Chile, Colombia y Perú", afirmó Humala a su llegada a Cartagena. La firma de este acuerdo estará acompañada de una declaración final de la cumbre cuyos detalles afinó el Consejo de Ministros, instancia formada por los titulares de Relaciones Exteriores y de Comercio de los cuatro países. La Alianza del Pacífico "está llamada a ser una piedra angular para una mayor integración en la región", dijo a periodistas el subsecretario de Economía de México, Francisco Rosenzweing, al analizar lo que supone para los cuatro países miembros este avance comercial. Una vez se firme el lunes este Protocolo Adicional, calificado por los países involucrados como un "hito" en materia de integración por el alcance de sus objetivos, el documento será sometido a los respectivos trámites de aprobación legislativa y jurídica en cada país. Esta liberalización comercial tiene pendiente, sin embargo, la eliminación de los aranceles del 8 % de los bienes del bloque, los llamados "productos sensibles", en su mayoría agrícolas, de los cuales está excluido el azúcar por petición expresa de los países productores. Ese mecanismo de integración, propuesto en el 2011 en Lima y materializado en la cumbre del 6 de junio del 2012 en Cerro Paranal (Chile), donde fue firmado el Acuerdo Marco, no se detendrá con el acuerdo arancelario porque la decisión de sus miembros es profundizar su integración en otros campos más allá de lo puramente comercial. "La Alianza del Pacífico es un proceso de integración profunda, de avance progresivo", dijo en una rueda de prensa el viceministro de Comercio de Chile, Álvaro Jana. Según Jana, tan importante como la desgravación arancelaria, "va a ser el que los cuatro países vamos a seguir profundizando y desarrollando los cinco pilares que son básicamente la libre circulación de bienes, de servicios, de capitales, de personas y por supuesto, la cooperación". "Somos cuatro países con muchas complementariedades", subrayó el viceministro chileno. Con este nivel de apertura e integración, el bloque pretende fortalecer el comercio con la dinámica región de Asia-Pacífico y expandirse en un futuro con la incorporación de otros miembros. El primero de ellos debe ser Costa Rica, cuya presidenta está en Cartagena para firmar el lunes el protocolo de adhesión que será una especie de hoja de ruta para su incorporación plena al bloque. "Para Costa Rica es una gran ocasión donde propiciaremos el inicio del proceso (de adhesión) hacia este importante grupo de naciones", afirmó Chinchilla a su llegada a Cartagena