Por las carreteras de La Guajira se transportaba un camión cargado de varios galones de insumos químicos, y en uno de los controles viales realizados por la Policía de Tránsito y Transporte del Departamento de La Guajira se detectó que el conductor del vehículo se puso nervioso, lo que despertó las alertas de las autoridades.
El estupefaciente era transportado en el kilómetro 96 de la vía que conduce del sector de Paradero con el municipio de Maicao, el cual llevaba 20 contendedores plásticos tipo IBC con capacidad para mil litros cada uno y camuflados con productos químicos industriales.
Luego de revisar uno a uno los recipientes y sacar muestras de ellos los investigadores sometieron la sustancia incautada a Pruebas de Identificación Preliminar Homologada (PIPH), donde se determinó que, de los 20 contenedores, 12 arrojaron positivo para clorhidrato de cocaína, para un total de 12.000 litros.
Durante el desarrollo de la investigación, se pudo establecer que el alcaloide incautado pertenecía a una organización criminal transnacional dedicada a ocultar narcóticos en contenedores, para transportar la sustancia en estado líquido desde la ciudad de Bogotá hacia Venezuela, donde después sería enviado a países de Centro América por vía marítima.
Expertos químicos de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín) le explicaron a SEMANA que la coca es diluida, dando la impresión de que la sustancia ilícita se convierte en líquida. En realidad, es un proceso que requiere fórmulas exactas que garanticen que la sustancia en la que se camufla el alcaloide se pueda volver a someter a un proceso químico que permita recuperar la coca pura.
Es algo similar a lo que sucede con un vaso de agua al que se le agregan cucharadas de sal, que a simple vista pareciera solo líquido, pero que si se evapora vuelve a quedar el mineral puro.
Son pocos los que conocen las fórmulas, algunos de los que las crearon son químicos titulados y otros empíricos. No hay que negar que son personas que se destacan por su “aparente” inteligencia. “Si fueran tan brillantes no utilizarían su talento al servicio de las organizaciones criminales porque sabrían que tarde o temprano caen y serán extraditados. Nunca terminan bien”, advirtió el general Fernando Murillo, director de la Dijín.
El conductor fue capturado y puesto a disposición de las autoridades competentes por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Es de resaltar que esta ruta hacia la frontera colombo-venezolana es apetecida por los narcotraficantes. Hace menos de dos semanas fue descubierto otro cargamento, en esa oportunidad el camión llevaba pollo crudo y en la zona de refrigeración del contenedor se encontraron 2.066 paquetes prensados de marihuana de exportación, con un peso aproximado de 1.033 kilogramos.
En los registros de movilidad, se pudo establecer que era la primera vez que este vehículo ingresaba a territorio guajiro y que, al parecer, el estupefaciente iba a ser llevado hasta un centro de acopio en el municipio de Maicao para posteriormente ser transportado a la Alta Guajira con el fin de enviarlo hacia Centroamérica o el Caribe en lanchas rápidas.
Este operativo se presentó sobre el kilómetro 53 de la vía que conduce del corregimiento de Palomino hacia el municipio de Riohacha, donde fue interceptado este vehículo, para ser inspeccionado por los uniformados.
El tractocamión fue modificado para poder esconder el estupefaciente. Este es un carro que requiere de un compartimento especial para la refrigeración del pollo y, aprovechándose de dichas características, los narcotraficantes adaptaron el espacio para camuflar los paquetes, envueltos en cinta café.