En medio de la despedida del mayor general Juvenal Díaz Mateus, quien estuvo al frente de la Séptima División del Ejército Nacional, quien se retira de la institución tras los últimos cambios ordenados por el presidente Gustavo Petro, una de las escenas que más llamó la atención fue el adiós que se dieron Díaz y el soldado Óscar Henao, conocido por ser el soldado más pequeño del país.
El momento quedó grabado, y en las imágenes se puede ver la nostalgia con la que ambos hombres enfrentan la despedida. Por un lado, el mayor Díaz se acerca a abrazar y a entregar unas palabras de sabiduría para el soldado, mientras este intenta sin éxito contener las lágrimas, se limpia su cara, y se mantiene escuchando a su superior.
La historia de estos dos militares hace que la despedida sea cada vez más dura. Puesto que el soldado Óscar Henao tuvo grandes dificultades a la hora de entrar al ejército, el argumento principal era su estatura, 1.30 centímetros. Sin embargo, fue la Séptima División la que finalmente lo aceptó y se comprometió a entrenarlo como al resto de reclutas.
Y entre sus principales labores estuvo el asistir al mayor general Juvenal Díaz Mateus. El soldado Óscar era quien se encargaba de ayudar con las necesidades y el orden de la agenda del mayor, por lo que, durante su formación en el ejército, este hombre pequeño estuvo recibiendo instrucción desde la cabeza de la brigada.
Ahora, el detalle que marcó la vida del soldado Óscar, parece ser que también dejó una huella inquebrantable en el mayor Díaz, quien no dejó pasar su despedida sin entregar unas últimas palabras a su pupilo, y en su cuenta de Twitter aprovechó para dejar un mensaje de exaltación hacia el sueño y valentía de Óscar.
“Soñaba con ser soldado, lo rechazaron por su estatura, persistió y hoy está aquí cumpliendo su sueño, sacando adelante a su familia y siendo un ejemplo para todos”, escribió el mayor Díaz, agregando el video en el que se despidió del soldado.
Y añadió: “Gracias Óscar Henao por su cariño, por su lealtad, por su compañía y por ese amor por el Ejército y por su mamá”, expresando su gratitud por el servicio prestado, así como por su entrega a la institución.
La Séptima División del Ejército Nacional quedó a cargo del brigadier general Óscar Murillo Díaz, tras el retiro del mayor Díaz.
El ministro de la Defensa, Iván Velásquez, indicó al momento de anunciar los cambios en la institución, que los propósitos de la nueva seguridad humana son que la fuerza pública esté más cerca del ciudadano y que se puedan tender caminos de negociación con los grupos criminales del país.
“Todo esto de la paz no significa debilidad. La paz no es una rendición del Gobierno nacional ni de las Fuerzas Militares. La paz es un proceso de construcción colectiva en la que tienen un papel trascendental todos los actores del conflicto”, explicó el ministro Velásquez.
Agregó el ministro que la fuerza pública continuará su obligación constitucional de velar por la seguridad de los colombianos, por lo que explicó que primero se necesitan manifestaciones y acciones concretas de voluntad de negociación o de acogimiento de los grupos ilegales.
Para el jefe de la cartera de defensa, la nueva política de seguridad humana privilegia la vida sobre la muerte, por lo que dijo que siempre se preferirá lograr capturas antes que los enfrentamientos terminen en muertes y anunció que se suspendían los bombardeos en donde se tenga información sobre la presencia de menores de edad reclutados.