Medicina Legal reveló los detalles de la muerte del coronel Óscar Dávila, uno de los sucesos que rodean el escándalo de las ‘chuzadas’ a la exniñera de la exjefa del gabinete del presidente Gustavo Petro, Laura Sarabia.
Tras el análisis forense, se determinó que el cuerpo del coronel presentaba una herida de bala de 4 x 2,8 centímetros en el lado derecho de la cabeza y que en el momento del disparo el arma estaba puesta en contacto directo con la zona.
“Se genera una herida muy característica, conocida hace más de un siglo como el signo de Benassi, que son residuos de pólvora combustionada o ahumamiento en la parte externa del cráneo y en los tejidos blandos que están debajo de alrededor del cuero cabelludo y alrededor de la herida del cuero cabelludo”, explicó el forense.
También hay una herida al lado izquierdo del cráneo, que es el orificio de salida del proyectil, y que es una herida irregular. Se determinó entonces que la trayectoria de la bala fue anterior-posterior y de derecha a izquierda.
También se encontraron salpicaduras de sangre en la mano derecha del coronel y en el puño de la camisa, que, de acuerdo con el médico forense, son una señal de que la persona tenía el arma empuñada.
Adicional a eso, el examen forense determinó que el cuerpo no tenía ningún signo de riña, lucha, sujeción o indefensión.
Medicina Legal encontró también que el Coronel se encontraba consumiendo un medicamento llamado alprazolam, cuyo efecto es ansiolítico, seguramente por un cuadro de ansiedad y estrés al que estaba sometido.
“Esta persona estaba tomando este medicamento seguramente por el cuadro de ansiedad y seguramente porque ayuda a conciliar mejor el sueño, entonces, desde el punto de vista forense, se puede decir que esta persona estaba expuesta a un estrés importante”, indicó el forense.
“Sabemos que fue un consumo agudo porque una de las muestras que salió positiva fue la de contenido gástrico, entonces era un consumo de unas pocas horas”, agregó el forense.
La conclusión de Medicina Legal es que no existe ninguna duda de que se trató de un suicidio: “Desde el punto de vista forense se puede determinar que la muerte tiene todas las características propias de un suicidio”.
La Fiscalía, entre tanto, investigará si hubo una inducción al suicidio en la muerte del coronel relacionada con lo que él sabía acerca del escándalo que desató el polémico polígrafo al que sometieron a la exniñera del hijo de Laura Sarabia y las ‘chuzadas’ a ella y a su empleada doméstica, haciéndolas pasar como integrantes del Clan del Golfo.
La ventana de la muerte
La vicefiscal Martha Mancera explicó que los investigadores estudian un concepto llamado la “ventana de muerte”, es decir, la última vez que vieron vivo al coronel, que fue alrededor de las siete y media de la noche.
Se trata de un video en el que el coronel visita a un familiar, lugar del que sale a las 7:53 p. m. Se observa el paso de la camioneta a las 6:10 p. m. Ahí llamó a su esposa para informarle que iba para su casa.
Ahí sucede la llamada con la periodista de Cambio. A las 18:18 se observa al conductor entrar al supermercado. Y ahí, relata el conductor, instantes después, el teniente coronel se dispara. “Esos son los hechos que relata el conductor del teniente coronel”, agrega.
A partir de esos momentos, la Fiscalía reporta el deceso del teniente coronel y designa un equipo de 25 personas para realizar las investigaciones del caso.
La Fiscalía también hizo una inspección al vehículo en el que fue encontrado el coronel Dávila sin vida. Los expertos de la Fiscalía señalaron que en la parte interna del vehículo se observó el rastro que dejó del proyectil.
“Se encontró el paso de un único (...) La posición relativa del cuerpo es compatible con la necropsia”, señaló el experto.
El arma del suicidio
El coronel Óscar Dávila se quitó la vida con el arma de su escolta, el patrullero Osman Javier Galeano Arango, quien la dejó en el vehículo, al parecer, para ir a comprar una botella de agua.
La Fiscalía señaló que en este caso no se hará una autopsia psicológica pues no hay duda de que se trató de suicidio.
Por el abandono del arma en el vehículo, la Fiscalía explicó que este será un asunto que el patrullero Galeano deberá explicar en el marco de una investigación disciplinaria, pero que no existe al respecto ninguna responsabilidad penal.
La Fiscalía también aseguró que, para el momento de la muerte, el Coronel Óscar Dávila no había sido citado a ninguna diligencia judicial por el caso Laura Sarabia.