A las 6:40 de la mañana de este sábado, Barranquilla se cubrió de luto por dos hechos que ocurrieron en puntos distintos de la ciudad pero en el mismo instante. En una negra coincidencia, murieron cinco policías y un vigilante por cuenta de dos eventos que el mismo presidente Juan Manuel Santos confirmó que no guardan ninguna relación entre sí. Los barranquilleros presenciaron una procesión de ambulancias en donde se transportaron a más de 42 uniformados heridos; a esa hora de la mañana estaban en formación en la estación del barrio San José, cuando detonó el artefacto. Los cinco policías asesinados fueron los patrulleros Yossimar Márquez Navarro, de 29 años; Anderson René Cano Arteta, de 32 años; Freddys de Jesús Echeverría Orozco, de 24 años; Freddy de Jesús López Gutiérrez, de 28 años, y Yamid José Rada Muñoz. Un ataque para despistar un millonario atraco fue la primera hipótesis que se barajó, pero también la primera que quedó descartada. Una segunda sospecha apuntaba a que los responsables de este atroz atentado fueran bandas criminales, precisamente por los golpes que las autoridades han dado en los últimos días. Sin embargo, el primer mandatario también dejó esta por fuera de la lista de posibilidades, al reconocer que se trató de una sofisticada operación que llevaba varios días de planeación. El domingo, otro hecho sacudió la capital del Atlántico. En Soledad, un atentado a un CAI a las 4 de la mañana dejó cinco heridos, dos policías y tres civiles. Se investiga si este también tiene que ver con esa serie de sucesos planeados para el fin de semana. Las autoridades explican que el accionar de los hechos de este fin de semana marca una ruptura en las formas del crimen pues no existe ningún antecedente en el que un grupo criminal de la costa en lugar de usar a uno de sus integrantes traiga a una persona desde Bogotá para realizar una operación. Por ello, las indagaciones se concentraron en las pistas que pudiera arrojar un hombre que fue capturado pocos minutos después de la detonación de los hechos del sábado. En contexto: Hombre capturado en Barranquilla llevaba planos para dos ataques Se trata de Cristian Camilo Bellón Galindo, de 31 años, quien había llegado días antes desde Bogotá a la capital del Atlántico. Fue detenido como el autor material del ataque terrorista ya que en su poder fue hallado un aparato con el que habría detonado desde la distancia el artefacto explosivo. Su participación protagónica en este episodio de terror fue tan clara para los investigadores, que el fiscal general, Néstor Humberto Martínez, no esperó la audiencia de judicialización para identificarlo con nombre y foto a los medios de comunicación como el responsable. Bellón Galindo será presentado ante un juez este mismo domingo para que responda por 5 homicidos, 42 tentativas de homicidio, terrorismo y uso de explosivos. En su poder también fue hallado un cuaderno; en una de sus hojas se pueden leer dos direcciones: la del ataque terrorista en barrio San José y la del CAI del barrio El Carmen, en donde al parecer se iba a realizar el siguiente plan criminal. En otra página, se ve cómo Bellón Galindo tenía un listado de pendientes separado por días y un número celular. SEMANA investigó detalles del pasado de Bellón Galindo, cuyo nombre aparece vinculado a la facultad de filosofía de la Universidad Pedagógica de Bogotá como estudiante. Registros dan cuenta que en el año 2011, al parecer resultó detenido en una protesta estudiantil en la capital que se tornó violenta. El presidente Santos reconoció en la noche de este sábado que no existe información suficiente para atribuirle a un grupo específico este ataque. De hecho, las respuestas que espera el gobierno las tendría el equipo anti explosivos del CTI que se movilizó desde la capital y que tomó las muestras del artefacto que fue usado por los terroristas. De otro lado, la Fiscalía anunció que vinculó a la investigación por el atraco al carro de valores a Rosemberg Yoli Pérez, integrante de las bandas Los Buitres y los Falsetes. Es identificado como el presunto responsable del asalto en el que murió un vigilante y otro más resultó herido. Aunque los asaltantes iban por un millonario botín, solo lograron llevarse la tula vacía, en la que los agentes de seguridad planeaban guardar el dinero sacado de un cajero electrónico en el Éxito Metropolitano. Puede leer: Stiven y Negro, dos víctimas de cuatro patas en el ataque de Barranquilla Las pistas y el modus operandi que fue empleado en este ataque revivió para investigadores el atentado terrorista perpetrado hace más de seis meses en el centro comercial Andino, de Bogotá. Sin embargo, hasta ahora ninguna autoridad se atreve a lanzar una hipótesis en este sentido. Las autoridades ofrecieron 50 millones de pesos de recompensa a quien dé información de los responsables y habilitaron la línea telefónica 3213945119 para recibir información.