En la mañana de este jueves 18 de mayo, una comisión judicial lidera las labores forenses para extraer los tres cuerpos sin vida hallados junto a la avioneta siniestrada en Caquetá.

Lo cierto es que esta aeronave cayó en una zona boscosa de la vereda Palma Rosa del municipio de Solano, Caquetá y fue encontrada el pasado lunes 15 de mayo.

El coronel Juan José López, director de Operaciones de la Aeronáutica Civil, había mencionado en las últimas horas sobre esta operación, “desplazamos un helicóptero con un personal de Policía Judicial para que sean ellos como autoridad, quienes hagan el retiro de los cuerpos de las personas que se encontraron sin vida en el lugar de la aeronave”.

Se espera que en las próximas horas los cuerpos sean entregados a sus familiares. | Foto: Fuerzas Militares de Colombia

Los cuerpos que hasta el momento han sido encontrados corresponden a Hernando Murcia Morales, quien es el piloto de la compañía Avianline Charter’s que alcanzó a reportar fallas en el motor y se declaró en emergencia ante la torre de control el pasado primero de mayo.

Así mismo, los otros dos cadáveres serían de: Magdalena Mucutuy Valencia, de 33 años, quien es la madre de los cuatro niños que permanecen desaparecidos, y Hermán Mendoza Hernández, quien era el director de la fundación de profesionales indígenas Yetara.

Estos son los rostros de los adultos que viajaban junto a los cuatro niños. | Foto: Suministrada a SEMANA

Sin embargo, SEMANA se contactó con uno de los familiares de los cuatro menores de edad para conocer cómo avanza la búsqueda de los pequeños, en la mañana de este jueves 18 de mayo.

“Hasta ahora estamos en espera que nos den una noticia buena, no hemos tenido nada de información”, señaló Fidencio Valencia, tío de Magdalena Mukutuy Valencia, quien es la madre los niños, la cual fue hallada sin vida junto a la avioneta siniestrada.

“Del cadáver (Magdalena) tampoco sabemos nada porque no lo han traído y de los niños, pues los están buscando, pero no los han podido encontrar”, recalcó el hombre ante la confusión que se generó en la tarde del miércoles 17 de mayo, cuando el presidente Gustavo Petro aseguró que estaban con vida.

Estas fueron las principales pistas de supervivencia. | Foto: Suministrada a SEMANA

Lo curioso es que el mismo presidente, después de más de 12 horas de haber publicado la información, borró el trino en su cuenta en Twitter, por lo que esto ha generado más incertidumbre para la familia de las víctimas.

“He decidido borrar el trino debido a que la información entregada por el ICBF no ha podido ser confirmada. Lamento lo sucedido. Las Fuerzas Militares y las comunidades indígenas continuarán en su búsqueda incansable para darle al país la noticia que está esperando. En este momento no hay otra prioridad diferente a la de avanzar con la búsqueda hasta encontrarlos. La vida de los niños es lo más importante”, indicó el mandatario de los colombianos en un nuevo trino publicado este jueves.

Gustavo Petro se retractó. | Foto: SEMANA

Ante esta situación, la familia de los pequeños Mukutuy Valencia se pronunciaron por medio de un comunicado en el que rechazan “la desinformación y manejo mediático que se le ha dado a la búsqueda, hallazgo, rastros de nuestros familiares”.

Así mismo, exigen respeto a las entidades públicas y privadas, así como también a los medios de comunicación que han dado a conocer esta difícil situación “respecto a la condición de vida y las falsas expectativas que se han divulgado” en las últimas horas.

“La salud física y emocional no es un juego que pueda ser borrado y/o fácilmente olvidado”, reseña el escrito.

Además, piden solidaridad para afrontar este momento, tras cumplirse 18 días del accidente de la avioneta que cubría la ruta entre Araracuara y San José del Guaviare, la cual cayó en la selva del Caquetá: “Solicitamos a todas las entidades competentes que adelanten las debidas diligencias y las investigaciones que haya ha lugar para que se determinen las causas del siniestro”.

La avioneta apareció en Caquetá. | Foto: Cortesía: Aerocivil.

De igual forma, le hicieron un llamado contundente al presidente, a la Aeronáutica Civil y la Fuerza Aérea Colombiana, “a mejorar, vigilar y proteger las vidas y la infraestructura de todos los aeropuertos, en especial los de la región amazónica. Muchos de los pueblos indígenas nos vemos obligados a hacer uso de aeronaves y pistas sin las condiciones mínimas de seguridad con altos costos”.

Lo cierto es que esta situación se convirtió poco a poco en la operación esperanza. Con el tiempo en contra, las Fuerzas Especiales y varias autoridades para la atención de este tipo de emergencias iniciaron una búsqueda esforzada.

A pesar de las condiciones climáticas, pistas como un tetero, una fruta, una moña, entre otras, dan señales de vida que aumentan las esperanzas de los rescatistas.

La empresa Avianline Charter’s, dueña de la avioneta siniestrada, en un comunicado advirtió que “acerca de la información sobre los menores perdidos, aún sigue la búsqueda con el personal de la Fuerza Aérea Colombiana y el padre de los menores, sin ningún resultado por el momento”.