Las autoridades caleñas decretaron la ley seca para este fin de semana en la ciudad, atendiendo los llamados de los expertos sanitarios para reducir la velocidad de los contagios de coronavirus en la capital del Valle del Cauca.

La medida restringe la venta de licor a partir del viernes 9 de abril desde las 10:00 de la noche hasta las 5:00 de la mañana del día siguiente y va hasta el domingo 11 de abril.

De igual forma, se mantiene el toque de queda entre las 8:00 de la noche y las 5:00 de la mañana.

De acuerdo con la información entregada por la secretaria de salud de Cali, Miyerlandi Torres, al jueves 8 de abril había una ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI) del 85,7 % y un total de 151.153 casos activos.

La medida no tiene aún una fecha de terminación pues se espera que se defina de acuerdo con la evolución de la pandemia en la capital del Valle.

Por otra parte, se mantiene la medida de pico y cédula para entrar a los establecimientos comerciales y la realización de otro tipo de diligencias, con el objetivo de evitar las aglomeraciones.

Endurecer las medidas en el departamento

La Gobernación del Valle del Cauca también les hizo un llamado a los alcaldes de Palmira, Buga, Tuluá, Cartago, Buenaventura, Caicedonia, Florida, El Cerrito, Roldanillo y Dagua para endurecer las medidas restrictivas y los controles que permitan reducir la velocidad de contagio de coronavirus en sus municipios.

Los actos de indisciplina social quedaron claros en Semana Santa, cuando pese a las recomendaciones del Gobierno departamental y las autoridades, se realizaron actividades sin acatar las medidas de bioseguridad y de orden público transitorias.

“La invitación es a endurecer las medidas de control por parte de las alcaldías y a la ciudadanía para que valore su vida y la de su familia. No nos están colaborando acatando las medidas, por eso en estos municipios se deben hacer controles más estrictos e implementar restricciones más duras”, señaló Camilo Murcia, secretario de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Valle.

De acuerdo con el informe de la Policía Valle, durante la Semana Santa se impusieron en Palmira 218 comparendos, en Buga 97, en Tuluá 58, en Cartago 56, en Buenaventura 52, en Caicedonia 25, en Florida 24, en El Cerrito 24, en Roldanillo 23 y en el municipio de Dagua 21. Se trata de sanciones por el incumplimiento de las medidas relacionadas con la covid-19 y el mal comportamiento en espacio público.

Una de las situaciones que más preocupa se presenta en el municipio de Calima-El Darién, donde las fincas y chalets son utilizados para realizar fiestas y reuniones masivas sin ninguna medida de bioseguridad.

Alarma por dengue en el Valle

A los casos de la covid-19 se suma la alarma por el aumento de casos de dengue reportado en los primeros tres meses del año.

Las autoridades de salud del Valle mantienen las alertas encendidas por el aumento de casos de dengue en los últimos meses. Y es que según el reporte de la Gobernación, a corte del 31 de marzo se registraron 2.625 positivos de esta enfermedad.

“El dengue es una enfermedad en la que su lucha es un asunto individual, familiar y comunitario; todos debemos estar atentos a los criaderos de dengue y los signos de alarma”, dijo la secretaria Departamental de Salud, María Cristina Lesmes.

De acuerdo con el Equipo de Vigilancia de Salud Pública, Cali, Yumbo y Obando presentan los mayores reportes de dengue. “Tenemos siete casos de muertes probables que están en estudio, tenemos una disminución de los casos en las últimas dos semanas producto de las lluvias intensas, pero el dengue sigue siendo una enfermedad endémica que el año pasado tuvo 27.600 pacientes”, dijo la funcionaria.

La Secretaría de Salud advirtió que es importante diferenciar los síntomas de dengue y de la covid-19, ya que el primero “no causa síntomas respiratorios, ni tos ni secreción nasal y tampoco dolor en la garganta, pero sí malestar general y fiebre generalizada, [por lo] que podría llegar a confundirse”.