En las últimas horas, en medio de un retén militar, fue rescatado un secuestrado que era movilizado dentro de una camioneta, que al parecer pertenecería a la Unidad Nacional de Protección, este último hecho se encuentra en verificación, según informaron fuentes de la institución castrense.
Los uniformados se encontraban sobre la vía que conduce a Tame con Puerto Rondón realizando control de rutina, cuando detectaron una situación sospechosa en la camioneta que se movilizaba y al hacer la inspección encontraron que los ocupantes llevaban a un secuestrado, al parecer, los captores serían integrantes del ELN.
Tras la posible información sobre que el vehículo en el que movilizaban al secuestrado era de la Unidad Nacional de Protección, la entidad a través e un mensaje en la red social X aclaró que dicho vehículo no se encuentra en sus bases de datos.
La UNP indicó que la autoridad judicial hace la verificación técnica de improntas, chasis, entre otros para poder constatar con veracidad la procedencia del vehículo y determinar si se trata de un automotor robado, y de placas adulteradas.
Así mismo la UNP indicó que el secuestrado, se identificó como Angelino Parada, quien dijo haber sido privado de la libertad.
Sobre el caso indicaron las Fuerzas Militares y el Ejército que: “En la vereda Las Nubes, zona rural de Tame, Arauca, las Fuerzas Militares ubicaron un puesto de control para realizar presencia institucional y brindar seguridad en la región. Un vehículo particular, detiene su marcha unos metros antes de llegar a ese punto, y descienden de él varios individuos quienes de inmediato salen corriendo y huyen en diferentes direcciones y con rumbo desconocido”.
“Las tropas, adoptan los protocolos de seguridad y tras verificar el automotor hayan a una persona que, al parecer, había sido secuestrada. A esta hora el rescatado es evacuado de la zona bajo custodia de las tropas para que reciba atención médica y realizar las respectivas diligencias con las autoridades competentes”, agregó la autoridad militar.
Es de anotar, que recientemente se han presentado varios hechos delictivos, en donde se han visto involucrados vehículos de la Unidad Nacional de Protección. Uno de los últimos escándalos ocurrió en Antioquia, en donde militares en un reten militar, detuvieron la caravana en la que se movilizaban varios cabecillas de las disidencia de las Farc que se encuentran en negociaciones de paz con el gobierno.
Allí, y luego de una controversia que tocó los niveles más altos del Ejército y del gobierno, la caravana fue obligada a movilizarse al batallón Pedro Nel Ospina, de Bello, Antioquia, en donde la Policía Judicial logró corroborar que en los vehículos viajaban también cabecillas con orden de captura vigente, hecho que iba en contra de la función de la caravana.
El robusto esquema de seguridad, estaba asignado a alias Calarcá, uno de los jefes de un grupo de 1.700 disidentes de las Farc, con los que el gobierno busca llegar a un acuerdo para que dejen las armas. Este sector hace parte del Estado Mayor Central, y decidió apartarse del grupo que comanda alias Iván Mordisco.