Ahora sí, Nicolás Petro, tendrá que contar días en el calendario para el arranque del juicio en su contra por los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos. La presentación del escrito de acusación es la puerta de entrada al juicio y a una eventual condena que podría llevar a la cárcel al hijo del presidente Gustavo Petro. La apertura de ese nuevo capítulo, ya tiene fecha.
El próximo 20 de noviembre y en la ciudad de Barranquilla se tendrá que encontrar Nicolás Petro con el fiscal Mario Burgos, el mismo al que le aseguró que estaba dispuesto a colaborar con la justicia y que dejó plantado en varias oportunidades cuando intentaron avanzar en los interrogatorios de esa fracasada promesa del hijo del presidente.
La Fiscalía radicó el escrito de acusación en contra de Nicolás Petro. Los detalles del documento fueron revelados por Noticias RCN y allí se advierte con contundencia cuáles fueron las irregularidades detectadas por los investigadores, probadas por el mismo hijo del presidente Gustavo Petro y confirmadas por quien era su esposa Day Vázquez.
Lo primero que explicó la Fiscalía en ese documento, de 83 páginas, fueron los argumentos que llevaron a la imputación por el delito de enriquecimiento ilícito, y cómo Nicolás Petro incrementó su patrimonio económico y por más que intentó, no logró demostrar el origen de esos recursos.
“No reportó tener obligaciones financieras, ni ser participante en sociedades, tener actividades económicas de carácter privado, fideicomisos, ni encargos fiduciarios; no informó tener inversiones en bonos, fondos de inversión, fondos de ahorro voluntario, ni tampoco haber recibido donaciones que representen deducciones en su declaración de renta”, señala el documento con los detalles de la acusación contra Nicolás Petro.
En la acusación, el fiscal del caso advierte que además de incrementar de manera injustificada su patrimonio, también trató de darle apariencia de legalidad a los dineros que en efectivo llegaban a sus manos y que guardaba en cantidades en el clóset de su apartamento en la ciudad de Barranquilla. Allí se configuró el delito de lavado de activos.
“Es decir, conforme lo anterior, el señor Nicolás Fernando Petro Burgos solo contaba con los ingresos percibidos por las sesiones ordinarias, extraordinarias y prestaciones sociales devengadas de su rol de diputado al interior de la Asamblea Departamental del Atlántico, del siguiente tenor”, señaló la Fiscalía para explicar al juez de Barranquilla los elementos y la inferencia de autoría y participación del hijo del presidente.
El patrimonio injustificado de Nicolás Pedro superó los mil millones de pesos, un incremento de sus activos que no tenían nada que ver con el sueldo que recibía como diputado del departamento del Atlántico. Le fue imposible demostrar que su riqueza provenía de su trabajo como funcionario público.
“Con los dineros recibidos por el señor Nicolás Fernando Petro Burgos en efectivo e injustificados en cuantía de $1.053.911.056 millones, al no ser el producto de la actividad económica como diputado, adquirió e invirtió en la compra del lote 2 AManzana 24, Carrera 8 No. 3-24 del proyecto SZIGE en Villas de Palmarito, Tubará, Atlántico, por un valor de $334.938.000, pagado en efectivo”, señala el ente acusador.
Así las cosas, y con el escrito de acusación en poder de los jueces de Barranquilla, la audiencia en la que se formalizará esa acusación, se tendrá que hacer, por orden de la misma judicatura, de manera presencial. Será, con seguridad, una diligencia bastante llamativa, un acontecimiento en la capital del departamento del Atlántico.