Las alarmas están prendidas en el Gobierno nacional por el proyecto de construcción del aeropuerto del café en Palestina (Caldas) pues, antes del 7 de agosto, se pretendía entregar el 35 % de la primera etapa y dejar adjudicada la segunda. Sin embargo, nada de eso pasó.
El proyecto consta de tres fases: 1. Remoción de tierra. 2. Construcción de pista. 3. Construcción de la terminal.
La empresa que se ganó la primera licitación fue Obrascón Huarte Lapin (OHL), una compañía española que fue sancionada recientemente por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia de España por 21,5 millones de euros.
El 13 de julio, la firma suspendió la construcción del aeropuerto argumentando que la estaban asfixiando económicamente por unas millonarias multas interpuestas por incumplimientos. Además, en marzo de 2021, OHL debía entregar un cronograma que solo presentó hasta noviembre del mismo año y el problema era que, sin esas pautas, era difícil avanzar.
Por lo anterior, OHL, nuevamente, fue sancionada con una multa de 1.800 millones de pesos.
Más tarde, el general (r) Gonzalo Cárdenas, quien llegó a la dirección de la Unidad de Gestión de Patrimonio Autónomo (entidad que maneja los recursos del contrato) el 13 de julio de 2021, evidenció más incumplimientos en el avance de la obra.
Cárdenas vio que el contratista debió remover dos millones de metros cúbicos de tierra para el 28 de marzo de 2022 o de lo contrario sería multado con el 20 % del valor del contrato, lo que equivale a más de 28 mil millones de pesos.
Hasta el momento, se ha identificado el incumplimiento puntual de la entrega programada, cuyo avance a esa fecha fue cercano a los 425.977 m3, y que, con corte al 13 de junio pasado, fue de 715.893 m3, muy lejos de la meta contractual de los 2.000.000 m3 programados.
A pesar de ello, la multa millonaria fue demandada por OHL ante un tribunal de arbitramento.
El general (r) Cárdenas también advirtió el 13 de mayo de 2022 sobre los riesgos contractuales, penales, fiscales y disciplinarios que generaría llevar a cabo las convocatorias para las fases 2 y 3 con los retrasos que había.
El 26 de mayo fue destituido el general de su cargo y ahora se busca dar terminación unilateral al contrato con OHL. A continuación, SEMANA revela la documentación al respecto:
Por otro lado, el pasado lunes, el contralor general de la República, Felipe Córdoba, habló sobre las obras del Aeropuerto del Café (Aerocafé) en donde están involucrados millonarios recursos públicos y en donde sigue latente el riesgo de que el proyecto quede inconcluso e inútil para el servicio de los usuarios y la comunidad.
Los advertidos por la Contraloría han sido los gestores fiscales del proyecto, la Aerocivil, la fiduciaria Colpatria y la Unidad de Gestión del Patrimonio Autónomo Aerocafé.
Un seguimiento permanente adelantado por la Contraloría al Proyecto Aeropuerto del Café llevó al ente de control a prender las alertas ante el reiterado incumplimiento que se le declaró, con la consiguiente multa que tuvo y la aplicación que se le hizo de la cláusula penal pecuniaria (por 28.019 millones de pesos) a OHL.
El ente de control estableció que el valor del anticipo es de 42.029′617.207 pesos y se han girado para el plan de inversión 16.066′591.750 pesos, de los cuales se ha amortizado solamente la suma de 1.138′127.827 pesos.
“Se evidencia que los riesgos al patrimonio público asociados a este caso son bastante altos, pues, por una parte, se ha tenido que conminar al contratista, a través de procesos de incumplimiento, lo cual significa que este no se ha allanado a su deber legal y contractual de cumplir a cabalidad las obligaciones a su cargo”, dijo el contralor.