Carlos Pizarro Leongómez fue asesinado el 26 de abril de 1990, en un avión que cubría la ruta Bogotá - Barranquilla. La investigación de la Fiscalía, 33 años después, permitió establecer que el esquema de seguridad fue debilitado progresivamente y de manera intencional para facilitar la acción criminal del sicario.

Un fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia abrió investigación en contra del exdirector del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), el mayor general en retiro Miguel Alfredo Maza Márquez, por su presunta responsabilidad en el homicidio del candidato de la Alianza Democrática M-19.

“El material de prueba obtenido indica que el esquema de seguridad de la víctima, del cual hacían parte detectives del DAS, fue debilitado progresivamente y modificado días antes del crimen de manera intempestiva y sin consultar al dirigente político, lo cual habría facilitado el actuar del sicario y el cumplimiento del plan criminal”, señaló la Fiscalía.

Lo que estableció la Fiscalía, a lo largo de esta investigación, es que el general Maza Márquez, como director del DAS, era el encargado de coordinar los esquemas de seguridad para la entonces candidato presidencial y no advirtió la reducción en el número de hombres a cargo de la vigilancia, lo que posteriormente fue usado por los delincuentes para atacarlo en un avión.

“De acuerdo con los protocolos y normas que regían para la época, el entonces director de la entidad era el principal coordinador y quien ejercía control sobre los cambios en las medidas de protección que se otorgaban. En ese sentido, las irregularidades y deficiencias presentadas dejaron al señor Pizarro Leongómez a merced de sus victimarios”, explicó la Fiscalía al tomar la determinación.

Los investigadores tratan de establecer la responsabilidad de los escoltas de Carlos Pizarro, tras advertir que el sicario que asesinó al candidato presidencial levantó las manos para entregarse y aun así le dispararon de manera repetida. Aparentemente, sería una estrategia de los integrantes del DAS para silenciar a los autores materiales de los magnicidios ocurridos en esa coyuntura violenta para el país.

“El contexto indica que este sería un patrón criminal al que, presuntamente, recurrieron algunos agentes del DAS para silenciar a los autores materiales de magnicidios de otros líderes políticos de la Unión Patriótica como Bernardo Jaramillo Ossa y José Antequera”, advirtieron desde la Fiscalía.

Pero reducir el esquema de seguridad o alterar la rutina en los servicios de vigilancia de Carlos Pizarro no fue lo único que, al parecer, hizo el general Maza Márquez. De acuerdo con la investigación, también trato de desviar el proceso en contra de los autores intelectuales, al punto de dejar la responsabilidad en el Cartel de Medellín.

“Finalmente, hay indicios de que, por cuenta de otra estrategia implementada por el mayor general (r) Maza Márquez, fue desviada la investigación para dirigir la atención hacia el extinto narcotraficante Pablo Escobar Gaviria”, señala el comunicado de la Fiscalía con la información del caso.

El director del DAS fue escuchado en indagatoria por parte de la Fiscalía, una actuación judicial que lo vinculó de manera directa al proceso y que ahora se convierte en la puerta de entrada a la investigación y que tendrá la posibilidad de llevar a una resolución de acusación, de encontrar responsabilidades del general en retiro en este crimen.