La Fiscalía General de la Nación anunció que conformará un equipo de fiscales e investigadores de la Dirección Nacional de Derechos Humanos para que viajen a Tierralta, Córdoba, donde la comunidad de una zona rural fue intimidada por militares armados.
“A raíz de los videos que están circulando por redes sociales en los que se ve a hombres armados intimidando a la población civil, en un caserío en Tierralta, Córdoba, la Fiscalía General de la Nación conformó un equipo de fiscales e investigadores de la Dirección Nacional de Derechos Humanos, quienes iniciaron los actos urgentes y harán presencia en el territorio”, dijo la entidad a través de X (antiguo Twitter).
Los hechos ocurrieron en la vereda El Manso, ubicada en zona rural de Tierralta, un municipio del sur de Córdoba, azotado por la violencia y la presencia de grupos armados ilegales. Lo lamentable de este caso es que en esta oportunidad quienes llegaron a generar zozobra fue un grupo de uniformados.
Aunque inicialmente se creía que los responsables de esta acción habían sido miembros del Clan del Golfo, el ELN o las disidencias de las Farc, grupos que tienen presencia en esa zona de Córdoba, luego la comunidad confirmó que los hombres eran soldados del Ejército Nacional.
Los hombres llegaron a la comunidad con el rostro tapado con un trapo negro y con armas largas en las manos. Frente a la situación, se escucha a los pobladores exigirles que se identificaran si eran un grupo armado ilegal.
En la grabación se observa cómo uniformados maltratan verbalmente a los habitantes de la vereda El Manso e incluso a varios de ellos los amenazan con dispararles, poniéndoles las armas en la cabeza.
“Ustedes fueron los que llegaron a humillarnos y tirarnos al suelo. Aquí nosotros no estamos violando nada, ustedes sí”, dice una de las mujeres víctimas de las intimidaciones armadas.
La tarea de la Fiscalía será verificar la situación de la comunidad y corroborar si no hubo personas heridas. Además, confirmarán si se trató de militares disfrazados. Allí
Reacciones a este hecho repudiable
Orlando Benítez, gobernador de Córdoba, afirmó inicialmente que los presuntos responsables de este hecho serían integrantes del quinto frente de las disidencias de las Farc y por ello le exigió “al Gobierno Nacional plenas garantías para nuestro territorio en el marco de la estrategia de la ‘paz total’”. Sin embargo, después volvió a pronunciarse y anunció un consejo de seguridad.
“He convocado consejo de seguridad extraordinario ampliado, para el día de mañana a las 9:00 a. m. en el comando de policía departamental, con el fin de conocer mayores detalles de los hechos ocurridos en la vereda Bocas del manso, Jurisdicción de Tierralta-Córdoba”, agregó Benítez.
La senadora del Pacto Histórico, Martha Peralta Epieyú, preguntó que si no eran disidentes de las Farc, entonces “¿lo hacían al servicio de quién? ¿Para dar percepción de inseguridad en el país?”.
El senador Ariel Ávila también se pronunció al respecto y dijo: “Lo ocurrido en Tierralta es de gravedad inmensa. Militares disfrazados de disidencias en zona del Clan del Golfo”.
Desde la oposición, inicialmente creyeron que era un acto cometido por las disidencias de las Farc y aprovecharon para exigirle respuestas al presidente Gustavo Petro. Uno de ellos fue Daniel Briceño: “Esto pasa en Tierralta, Córdoba, mientras el presidente Gustavo Petro hace turismo por la casa de Pablo Neruda en Chile. Las FARC se fortalecen mientras el Presidente se toma fotos en el exterior”.
Tierralta, Córdoba, ha sido históricamente un municipio afectado por la presencia de grupos armados ilegales, quienes se disputan las rutas del narcotráfico, pues ese es un municipio que limita con el Bajo Cauca antioqueño.