Una nueva alteración del orden público se registró sobre las 2:40 de la tarde de este lunes, 27 de marzo, donde la ciudadanía reporta un atentado contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas.

De acuerdo con la información recopilada, este hecho se presentó en el sector de la vereda Bojabá, límites entre Saravena, Arauca, y Cubará, Boyaca. Esta nueva acción violenta sería la octava en lo recorrido de este año 2023, donde el Ejército de Liberación Nacional (ELN) sería el responsable de estos hechos.

La ciudadanía grabó los momentos de la explosión. | Foto: Tomada de Facebook: Carmen Rosa Pabón

De momento, no se registran víctimas mortales, tan solo se presentan daños contra una parte del ducto de transporte de crudo de los campos de producción de este oleoducto, el cual ocasionó una fuerte explosión y seguido a eso se generó una columna de humo.

Ante esta situación, las autoridades ya tienen conocimiento de este ataque y se desplazan a la zona afectada para contrarrestar con este flagelo, mientras los habitantes de esta zona se encuentran en zozobra tras estos múltiples atentados contra la infraestructura petrolera.

Ataques al oleoducto

Ecopetrol y su filial Cenit se pronunciaron sobre los hechos violentos que se vienen registrando en el departamento de Arauca y que han tenido impactos sobre la infraestructura petrolera y con ello, sobre el medioambiente.

Mediante un comunicado, la compañía manifestó que en lo que va corrido de 2023, el oleoducto Caño Limón-Coveñas había sido objeto de siete acciones violentas, perpetradas por grupos al margen de la ley. De ese total, cinco corresponden a atentados, y dos a la instalación de dos válvulas ilícitas para la extracción de hidrocarburos.

La explosión afectó la línea de agua que va hacia planta deshidratadora Lisama del campo de producción La Cira Infantas. | Foto: Ecopetrol

Con respecto al séptimo ataque, este se presentó el pasado 21 de marzo, en la vereda La Pava, zona rural del municipio de Saravena, donde el evento está siendo atendido por personal técnico de Cenit.

“Los atentados y la instalación de válvulas ilícitas para hurtar hidrocarburos ocasionan derrames de crudo que afectan quebradas, ríos, suelos, capa vegetal, parcelas y cultivos, cuya limpieza y recuperación se dificulta por los continuos hostigamientos de los grupos armados ilegales a las cuadrillas de trabajo que realizan estas actividades”, expresó Ecopetrol.

La principal petrolera del país sentó su voz de rechazo frente a este tipo de acciones, al tiempo que lamentó la muerte de un suboficial del Ejército, en hechos ocurridos el pasado 19 de marzo, en la comunidad de Tame, destacando, a su vez, el apoyo que brinda la Fuerza Pública, no solo a las empresas del sector minero-energético; sino a las comunidades en general.

Atentado oleoducto Ecopetrol | Foto: Cortesía: Gestión del Riesgo Santander

“Situaciones como estas ponen en riesgo la vida, la integridad personal, la libre movilidad y el medioambiente, afectando a los trabajadores y sus familias, así como a los demás habitantes del departamento”, sostuvo Ecopetrol que realizó un llamado para que se respeten los derechos humanos y cesen las acciones violentas contra la infraestructura energética del país, de interés de la Nación y que se permita el restablecimiento normal de las actividades de la población en el departamento de Arauca.

Vale la pena destacar que para el año pasado, en el oleoducto Caño Limón-Coveñas –que posee una capacidad para transportar hasta 210.000 barriles de crudo al día– fue objeto de 13 atentados, algunos de los cuales provocaron afectaciones al medioambiente, por lo que este impacto es el que busca la petrolera estatal prevenir, de allí que pide el cese de estas acciones violentas.