La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, dio a conocer las medidas ambientales que empezarán a regir desde este sábado 5 de febrero para mitigar el impacto que está generando la mala calidad del aire en la capital.
López aseguró que los incendios forestales que se presentan en el departamento del Guaviare tienen una incidencia en la calidad del aire en Bogotá y ya se tiene la certeza de que la circulación de la contaminación llegó a la capital. Por esa razón, la alcaldesa anunció la declaratoria de la alerta amarilla en todo el sistema hospitalario por la alerta ambiental.
Con esta medida todo el sistema hospitalario de la capital estará totalmente volcado a atender enfermedades respiratorias y todo el personal médico deberá estar concentrado para atender las necesidades que la alerta ambiental genere en estos días. La alcaldesa aseguró que la calidad del aire pasó de moderado a regular y por ello es necesario tomar decisiones.
Además de la alerta amarilla, Claudia López hizo unas recomendaciones en salud pública para evitar enfermedades respiratorias. Por ejemplo, pidió a los ciudadanos no hacer actividad física y deportiva al aire libre por la mala calidad del aire que hay en este momento. Así mismo, el uso del tapabocas en recintos cerrados o en el espacio abierto por la prevención de la covid-19 y los problemas del aire.
En un principio estas recomendaciones se aplicarán por ocho días y el próximo viernes se hará una nueva evaluación para determinar si se levanta la alerta amarilla o se decretan nuevas medidas para controlar la contaminación. López aclaró que el pico y placa que se ha implementado durante todo el día ha servido para disminuir la mala calidad del aire, pero debe haber un constante monitoreo porque las estaciones de la capital están registrando bastante contaminación.
“Los vientos que soplan desde la Amazonia llegan a Bogotá. Nos duele el daño patrimonial y las afectaciones, pero además la contaminación llega a la capital. El Gobierno confirmó que en cuatro focos de incendio en el Guaviare hay manos criminales”, dijo López.
Agregó que “el 24 de enero, un día antes que empezaran los incendios en Guaviare, la calidad del aire estaba un poco mejor por el pico y placa todo el día. Cuando no tenemos esa medida, la ciudad presenta contaminación después del 11 de enero por la combustión de los carros. Este año no ocurrió por el pico y placa. Como empezaron los incendios forestales, en cinco días llegó la contaminación a Bogotá y desde el 1.° de febrero se sienten las consecuencias. El 5 de febrero más de la mitad de las estaciones pasaron de moderado a regular”.
Finalmente, la alcaldesa señaló que los bomberos de Bogotá están atentos a controlar conflagraciones en la ciudad, pero que de ser necesaria la ayuda en otras regiones del país, se hará un traslado inmediato para controlar las emergencias en otras regiones.