La mañana del martes 14 de diciembre paralizó al país con un doble atentado perpetrado en el Aeropuerto Camilo Daza de la ciudad de Cúcuta. Dos detonaciones cobraron la vida de los intendentes William Bareño y David Reyes, quienes habían sido nominados recientemente en la categoría de heroísmo en la Noche de la Excelencia, premios que entrega la Policía a uniformados que se destacan por sus acciones.

Con el objetivo de obtener información que ayude a identificar a los autores intelectuales y materiales del atentado, el ministro de Defensa, Diego Molano, ofreció una recompensa de $ 100 millones.

El jefe de la cartera de Defensa, además, anunció que se reforzará el Plan Esparta con un grupo antiterrorismo que patrullará Cúcuta y zonas aledañas. Para cumplir esta misión, la capital de Norte de Santander contará con al menos 200 hombres de la fuerza pública. Asimismo, inmediatamente después de que se registraron las explosiones, un pelotón del Ejército arribó al aeropuerto para brindar protección.

“Queremos avanzar no solo en el esclarecimiento de estos hechos, sino con información que nos permita avanzar en el desmantelamiento de esas organizaciones que han cometido actos terroristas, como el de esta mañana”, señaló el ministro Molano.

De manera preliminar, según las hipótesis compartidas por el ministro de Defensa, el atentado en el Aeropuerto Camilo Daza habría sido perpetrado por disidencias del frente 33 de las Farc al mando de alias Jhon Mechas, o el ELN. Según especificó Molano, los informes presentados por los técnicos establecen que el sistema utilizado en los explosivos tiene características que podrían asimilarse a hechos anteriores ejecutados por estos grupos armados. El objetivo, al parecer, habría sido afectar las aeronaves de la Fuerza Pública que se encontraban en la pista.

¿Quiénes fueron las víctimas?

El atentado cobró la vida de tres personas: dos intendentes de la Policía y una tercera persona aún sin identificar -posiblemente, el autor material del hecho-. Al respecto, el director de la Policía, el general Jorge Luis Vargas, señaló que “se priorizaron con la Fiscalía las labores de identificación de este sujeto que murió en el lugar y que llevaba los explosivos”.

En su cuenta de Twitter, el general Vargas compartió quiénes fueron los dos intendentes que fallecieron en el aeropuerto Camilo Daza a causa del atentado con los explosivos.

Intendente William Bareño Ardila

Tenía 42 años -21 de ellos en servicio-. El intendente Bareño era oriundo del municipio de Barbosa, en Santander, tenía tres hijos y durante su tiempo en la Policía salvó cientos de vidas, según destacó el general Jorge Luis Vargas.

Su labor fue tan destacada que, recientemente, había sido nominado en la Noche de la Excelencia Policial, gracias a su trabajo en los procesos de desactivación de minas antipersona en Norte de Santander, especialmente la región del Catatumbo, una de las zonas más golpeadas por la violencia y el narcotráfico. De hecho, junto a su compañero David Reyes -quien también falleció en el atentado- formó parte del equipo que neutralizó un carro bomba que en municipio de El Tarra hace unos meses.

Intendente David Reyes

Se unió a la Policía Nacional en 2005. Desde entonces, se caracterizó por su heroísmo y valentía durante sus 16 años de servicio. Al igual que su compañero William Bareño, Reyes fue nominado en la Noche de la Excelencia Policial gracias a su destacada labor.

David Reyes tenía 38 años, nació en Fusagasugá y era uno de los técnicos antiexplosivos que protegía a los habitantes de Norte de Santander. Su destacada labor le hizo merecedor del segundo lugar en el premio Corazón Verde.

Violencia en el Catatumbo, un mal de tiempo atrás

Los hechos violentos en Norte de Santander no son nuevos. La región del Catatumbo, especialmente, ha sido sitiada por grupos armados y dedicados al narcotráfico. De hecho, según el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (Simci), de Naciones Unidas 2020, el Catatumbo es la región con mayor número de hectáreas sembradas con coca en el país. Por supuesto, la disputa por estos terrenos ha derivado en una permanente tensión con la fuerza pública y la comunidad.

Así mismo, en esta región tienen presencia disidencias de las Farc, ELN, Los Pelusos y más de veinte grupos delincuenciales que disputan el control de la zona. Por eso, la baraja de posibles autores del atentado perpetrado en el Aeropuerto Camilo Daza, durante la mañana del martes 14 de diciembre es amplia.

“Cúcuta viene siendo objetivo militar de no menos de veinte grupos delincuenciales dedicados al narcotráfico, donde están estructuras guerrilleras, exguerrilleras, delincuentes nacionales, internacionales, Rastrojos, Pelusos, Clan del Golfo, Tren de Aragua“, le contó a SEMANA el alcalde de Cúcuta, Jairo Yáñez.

Sin embargo, quienes tienen más control criminal sobre la ciudad son algunas estructuras disidentes y el ELN, que han firmado una tregua para repartir el botín delincuencial.