La desgracia visitó en la mañana de este jueves al municipio vallecaucano de Pradera, luego de que -según primeras versiones- una moto cargada de explosivos y aparcada a un costado de la sede de la Alcaldía explotó y dejó un siniestro saldo de dos personas muertas y por lo menos 56 heridas. Las autoridades atribuyen el atentado terrorista al frente sexto de las FARC, cuya tregua ofrecida a fin de 2013 precisamente finalizó este miércoles. El presidente Juan Manuel Santos, quien manifestó que las FARC actúan de una forma "irracional y contradictoria", ordenó al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, desplazarse hasta la región para apersonarse de la situación. El mandatario trinó: “Condenamos vil acto terrorista en Pradera. @mindefensa se traslada al sitio. Qué forma tan irracional y contradictoria de actuar de las FARC”. El reporte preliminar de las víctimas, entregado por el hospital del municipio, incluye como herido al sargento viceprimero Wadis Antonio Payares –a quien atienden en Palmira- y al menos dos auxiliares policiales más. La víctima mortal fue identificada como Jorge Ospina, según reporta la versión electrónica del El País. Entre las personas heridas se encuentran al menos tres menores de edad -un bebé de seis meses, otro menor de siete y un adolescente de 16-. Así mismo, seis heridos fueron trasladados a Palmira y otro más a Cali, dijo al diario vallecaucano Yaneth Pulido Tenorio, coordinadora médica del Hospital San Roque de Pradera. Según ha declarado el comandante de la Policía de Valle del Cauca, coronel Mariano Botero Coy, el hecho ocurrió hacia las 9:10 a. m. y las personas afectadas por la explosión sufrieron heridas leves. La mayoría de los lesionados presentan casos de aturdimiento por la onda explosiva. Por su parte, el alcalde de la localidad, Adolfo León Escobar -quien resultó ileso- aseguró a varios medios lo más preocupante es que en varios informes de inteligencia se había advertido un presunto ataque de las FARC a esa población. En la región hacen presencia, además del frente de las FARC ya señalado, la columna ‘Gabriel Galvis’, aunque hasta ahora este grupo guerrillero no se ha adjudicado el hecho. Los municipios de Pradera y Florida fueron propuestos por las FARC como zona de distensión en 2006, durante la presidencia de Álvaro Uribe, para eventuales negociaciones de paz, pero el entonces mandatario –tras algunas negociaciones- rechazó el plan.