Tras el consejo de seguridad extraordinario que lideró la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, con autoridades de Policía, Ejército y Fiscalía, se conocieron más detalles de las investigaciones que avanzan en contra de la organización criminal conocida como el Tren de Aragua.
Esta organización criminal, de origen venezolano y que extendió sus tentáculos a Bogotá, sería responsable de los macabros asesinatos de los que en las últimas semanas ha sido testigo la comunidad, con el hallazgo de cuerpos desmembrados y embolsados en las esquinas de la ciudad.
SEMANA conoció una serie de amenazas que cursan en contra de la Policía y habitantes de sectores donde delinque esta organización criminal. Con nombre propio amenazan a los uniformados que trabajan en los cuadrantes y que ayudan en la vigilancia de las localidades.
De modo particular, en el sector de Kennedy (sur de Bogotá) e irónicamente en una zona conocida como La Virgen de Patio Bonito está ubicado el Hotel del Negro, un improvisado paga diario que ofrece servicio de alojamiento por precios que arrancan en 5.000 pesos, pero que se convirtió en un antro de torturas, secuestro y asesinato.
Es justamente en este sector donde los policías de los cuadrantes reciben amenazas de esta organización criminal para evitar los procedimientos de control y dar vía libre a las actividades criminales del Tren de Aragua. Los testigos aseguraron a las autoridades que en ese hotel ingresaban personas que luego aparecieron asesinadas.
Mediante panfletos escritos a mano y fotografiados junto a una pistola y una granada de fragmentación les advierte a los policías que están bajo amenaza del llamado Tren de Aragua. En esa localidad fue donde se logró la captura de un sicario de este grupo criminal. Alias Alfredito es un hombre de 28 años de edad con un largo prontuario asesino en el que solo en Colombia ―se investiga― tendría más de 40 homicidios.
Una investigación de SEMANA reveló que en la capital del país existen centros de tortura donde el Tren de Aragua concreta los asesinatos. En el centro de Bogotá está la Casa de los Masajes y en la localidad de Kennedy el llamado Hotel del Negro. Las evidencias, de manera preliminar, fueron negadas por la Alcaldía; sin embargo, tras la evidencia, reconocieron la existencia de estos antros de terror.
El propio secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, advirtió que tienen la evidencia suficiente para confirmar que existen estas casas de tortura y justamente por eso se implementó una nueva estrategia de investigación que estará apoyada por unidades especializadas de la Policía.
“Lugares donde muy probablemente han ocurrido estos delitos, estos homicidios, donde ha ocurrido previamente tortura y terminan asesinando a sus víctimas. En algún lugar debe ocurrir eso para después dejar abandonados los cuerpos en bolsas, en alguna zona de Bogotá. Las investigaciones avanzan, tenemos información de inmuebles donde pudo ocurrir asesinatos, no solamente estos casos, sino los anteriores”, dijo el secretario.
El comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, el general Carlos Triana, aseguró que para avanzar en las investigaciones se sumó la dirección de policía judicial, el Gaula, la Unipol y hasta la oficina de Interpol, después de considerar que se están enfrentando a una organización transnacional.
“A partir del trabajo interinstitucional de la Fiscalía, con toda la capacidad de la Policía Nacional a través de la Dirección de Policía Judicial Dijín, de la dirección de Inteligencia, la dirección Antisecuestro y Extorsión, vamos a trabajar de forma articulada para avanzar en los procesos de investigación que se vienen adelantando”, dijo el general Triana.
La preocupación de la ciudadanía la comparten las autoridades que semana tras semana se han encontrado con los hallazgos macabros en las esquinas de Bogotá. La advertencia está hecha y la alcaldesa incluso pidió a las autoridades de Venezuela apoyar la desarticulación de esta organización criminal.